La familia del médico argentino Mario Rafael Chalco Llerena, que murió el pasado mes de julio infectado por la Covid-19 mientras trabajaba en el Hospital de Martorell (Barcelona), ha logrado que la mutual del centro reconozca su fallecimiento como accidente laboral. Inicialmente, la baja del facultativo, de 52 años y que estuvo 109 días ingresado en la UCI del Hospital de Bellvitge, fue catalogada como enfermedad común, lo que impedía que su mujer, Carmen Torres, y sus cuatro hijos, pudieran obtener las prestaciones de viudedad y de orfandad, respectivamente, ya que el médico sólo llevaba un año trabajando.
El doctor Chalco era el único sustento económico de su familia, que en enero viajó desde Argentina para visitarla y tras el estallido de la pandemia y el cierre de las fronteras quedó en un limbo legal al no tener regularizada su situación, generando este caso testigo.
"Estamos muy contentos de que finalmente se haya hecho justicia con este caso", ha celebrado en declaraciones a Efe la portavoz del sindicato Metges de Catalunya, Àngels López, que ha subrayado que, si no se hubiera aceptado el reconocimiento como accidente de trabajo, la familia habría quedado desamparada y sin ningún ingreso.
Al llevar solo un año trabajando en el Hospital de Martorell, López ha explicado que la familia del doctor Chalco no tenía derecho a ninguna prestación si el fallecimiento era considerado fruto de una enfermedad común, mientras que el reconocimiento del accidente laboral permite acceder a las pensiones de viudedad y orfandad sin importar el tiempo cotizado o el periodo de carencia de las mutuas.
Este reconocimiento se suma a la reciente autorización por parte del Gobierno español de la residencia legal de la familia, que no pudo completar el trámite de reagrupación familiar por la defunción del médico. La representante del sindicato, que ha acompañado a la familia en el proceso para cambiar la catalogación de la baja y la defunción,
ha subrayado que "era muy claro" que el caso del doctor Chalco debía ser considerado un accidente laboral: "Estuvo desde el primer día de la epidemia en la primera línea tratando a enfermos con Covid-19 y en una situación precaria en cuanto a las medidas y materiales de protección".
Asimismo, ha lamentado los obstáculos que en este y otros casos ponen las mutuas para reconocer las bajas de los facultativos como accidentes laborales. López ha recordado que el real decreto ley del 26 de mayo de 2020 establece como accidente laboral los contagios por Covid-19 del personal que presta servicios en centros sanitarios o sociosanitarios y que un decreto posterior prorroga indefinidamente este reconocimiento hasta que se levanten todas las medidas de prevención.