El Auditorio "Juan Victoria", ícono cultural de San Juan.

Las Bodas de Oro del Auditorio "Ing. Juan Victoria", que se cumplen este mes, merecen ser celebradas por cada sanjuanino desde el más sano orgullo por un templo de la Cultura único en el país y varias veces mencionado como uno de los más destacados de Latinoamérica. Sabemos que las excepcionales circunstancias que vivimos en nuestros días, por la pandemia del Covid-19, impiden que las autoridades del ministerio de Turismo y Cultura y del mismo Auditorio conmemoren con un programa especial estas cinco décadas, pero estamos seguros que se hará muy pronto, apenas lo permitan las normativas sanitarias. Mucho se ha escrito sobre los primeros pasos para la construcción de esta obra monumental que en el año 1970 se convirtió en una bisagra imponente para definir un antes y un después del disfrute de lo mejor de la música clásica entre nosotros. Pero no sólo de esta corriente, sino de numerosas manifestaciones del arte musical, por tratarse de una sala diseñada como centro de altos estudios musicales, apuntando tanto a "ejecutantes de algún instrumento, como también a compositores o musicólogos", según un trabajo de investigación del Lic. Michel Zeghaib. Por todo ello, son habituales los conciertos semanales de los cuerpos estables de la Orquesta Sinfónica, Orquesta Juvenil y Cátedra de Órgano y Coro (UNSJ), las funciones de abono del Mozarteum Argentino, filial San Juan, los Festivales Internacionales de Coros "San Juan Coral", organizados por el Coro "Beruti", festivales corales nacionales y locales, actividades culturales del ministerio de Turismo y Cultura, Gobierno Provincial y de la Asociación Amigos de la Música. Diez años antes de su inauguración había visto luz el proyecto, y el genial padre de la idea fue el ingeniero Juan Victoria, quien hizo valer su cercanía con autoridades nacionales del área económica en tiempos del presidente Arturo Frondizi, y sus funciones en el Concar (Consejo Nacional de Construcciones Antisísmicas y de Reconstrucción de San Juan), para gestionar el subsidio que terminaría con éxito. Sin embargo, no hay que olvidar que fue fundamental el papel de otros sanjuaninos y una porteña, en lo que sería el inicio y consumación de la majestuosa obra. Hablamos de los arquitectos Mario Pra Baldi, Eduardo Caputo Videla y la arquitecta Carmen Renard. Los tres concretaron el diseño y trabajaron al unísono con Victoria en 1959. Con ellos, también el ingeniero Federico G. Malvárez, quien fue responsable de la acústica de la sala que a la sazón "superaba a la del mítico Teatro Colón", según Zeghaib. Renard (1915-2002) fue la primera arquitecta argentina en ganar un concurso de proyectos. Se perfeccionó en la Universidad de Columbia (EEUU) y a su regreso, fue convocada para el ambicioso proyecto de reconstrucción de San Juan (1944). Pero su obra más importante fue participar en el diseño del Auditorio, aunque también se la conoció como activa colaboradora en el teatro, incluso como actriz (trabajó en filmes como "El lado oscuro del corazón", de Eliseo Subiela, y "El sueño de los héroes", de Sergio Renán), y fue una de las creadoras del teatro de Cámara "El Globito", como parte de la Escuela de Arte Dramático, junto a Polo Suárez Jofré y Silvina Martínez, entre otros. Por su parte, Mario Pra Baldi, oriundo de Belluno, Italia, obtiene el título de arquitecto en la Universidad Nacional de Cuyo, y ha estado dedicado fundamentalmente a la docencia en la Facultad de Arquitectura, donde se lo nombró profesor emérito en 1992. También hizo docencia en el departamento de Artes Plásticas y Museo Tornambé durante diez años. Según publicó "El Nuevo Diario", para la profesora Leonor Rigau de Carrieri, Pra Baldi "sobrevaloriza la técnica tradicional pictórica y el espacio organizado, ubica el precepto en un vacío extrañamente silencioso preñado de acontecimientos, haciéndonos sentir la ausencia como llena de mensajes". Destacan sus muestras individuales y colectivas en San Juan, Mendoza y otras provincias argentinas, así como en exposiciones en Estados Unidos, Francia y Canadá. Por todo ello, posee premios, menciones y distinciones. A su vez, Mario Eduardo Caputo Videla fue exrector de la Universidad Nacional de San Juan, y durante su gestión fue creada la facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño. Ministro de Obras Públicas en el primer gobierno de Carlos Gómez Centurión, no sólo colaboró en las tareas de diseño del Auditorio junto a Renard y Pra Baldi, sino que se desempeñó durante su construcción como jefe de Obras de este emblema de la cultura sanjuanina de 25 mil metros cuadrados y una superficie cubierta de 6.880 metros cuadrados. 

 

Luis Eduardo Meglioli 
Periodista – ex Subsecretario de
Cultura y Turismo de la Provincia