Señor director:
Hace 2 meses quiero renunciar a Directv de San Juan y es todo una lucha. Cuesta muchísimo comunicarse con el teléfono indicado para renunciar y cuando se logra ese objetivo te pasan a otro y otro hasta que finalmente hay uno que no te contesta más. Este procedimiento lo realicé en numerosas ocasiones, hasta hartarme, sin conseguir nada positivo. Así pasó un mes y me volvieron a facturar algo que no quiero. Lamentablemente, cada vez que pasa esto tengo que pagar el servicio porque me dijeron que si no estoy al día no me darán curso a la renuncia.
Por otra parte decidí concurrir a las oficinas comerciales y me dijeron que ellos no pueden solucionar mi problema. Entonces dije que iba a recurrir a Defensa del Consumidor, ante lo cual me respondieron lo siguiente: “Vaya adonde quiera, total al dueño le importa un bledo lo que usted haga”.
Me siento impotente ante esta situación. Cómo puede ser posible que no se pueda renunciar y tener que pagar algo que no puedo ni quiero sostener. Pienso que a mucha gente le debe ocurrir lo mismo. Sólo me queda insistir con el teléfono y rogar que un milagro se produzca.
