El comienzo de año significará un volver a nacer en la vida de este animal. Esta tarde, una familia que se encontraba de paseo en Rodeo, divisó a un caballo que estaba enterrado hasta el cuello en el barro. De inmediato y como pudieron intentaron socorrerlo, pero como vieron que los esfuerzos eran en vano de inmediato se acercaron hasta la comisaría y pidieron ayuda policial.

 

Sin dudarlo ni un instante, varios uniformados se acercaron hasta la zona para tratar de socorrer al animal. Después de dos horas de arduo trabajo, finalmente pudieron desenterrar al equino.

 

Según informó la familia Saso – Bazán, el caballo tenía un corte en el pecho y una de sus patas traseras sangraba un poco. Además, se lo notaba visiblemente desnutrido. Los efectivos lo llevaron hasta la comisaría para determinar los pasos a seguir.