Intentar que materiales que fueron desechados como residuos sean convertidos en materia prima fue el objetivo que motivó a que Genneia, una empresa de generación de energías renovables, realizara talleres en escuelas. Esta empresa, que se encargó de la construcción del parque solar Sierras de Ullum, contrató a Marcelo Parodi para que organizara estos talleres y se encargara de dictarlos. El arquitecto comentó que estas capacitaciones fueron realizadas para padres y alumnos de dos escuelas de Ullum y que buscaron que estos nuevos conocimientos también se conviertan en una salida laboral para los beneficiarios. "La idea es replicar este proyecto en otras escuelas", dijo Parodi y contó que en los talleres construyeron prototipos de maceteros urbanos, un mueble para separación de residuos, un sillón y unos carteles con información turística que fueron donados a la Municipalidad de Ullum.
"Genneia generó residuos no contaminantes durante su proceso. A medida que avanzó el montaje de paneles, comenzaron a acumularse pallets, cajones de multilaminado y bobinas para cables entre otros sobrantes, y ante esta situación se propuso como solución integral reinsertarlos a la comunidad local con una segunda vida", comentó Parodi y dijo que ahí es cuando él y su equipo entraron en acción e idearon el proyecto, junto a dos escuelas del departamento Ullum.
Utilizando las maderas sobrantes de la construcción del Parque Solar Sierras de Ullum, alumnos y un grupo de padres de la escuela EPET 9 empezaron con las clases. Primero aprendieron teóricamente sobre la importancia de la sostenibilidad medioambiental y después realizaron prácticas de carpintería artesanal con maquinaria y herramientas donadas por la empresa. "Aprendieron el arte de cortar, cepillar, calar, atornillar, clavar, encolar, lijar y pintar madera. Y a utilizar desde sierras circulares hasta taladros y atornilladores inalámbricos, entre otras herramientas", dijo el arquitecto, que fue quien dictó estas clases. Posteriormente, la terminación, con barniz y pintura, la realizaron los estudiantes de la Escuela de Educación Especial Múltiple de Ullum, quienes también formaron parte del taller.
"Para definir qué productos realizar se tuvo en cuenta las necesidades de la comunidad de Ullum en cuanto a mobiliario urbano y mobiliario social doméstico. Con esta premisa se decidió fabricar 5 prototipos de muebles para luego ser replicados en serie", explicó Parodi y agregó: "Esta experiencia de economía circular cumplió con dos objetivos propuestos: por un lado, reciclar materiales sobrantes de una obra en construcción para un fin social, y por otro crear un taller que logre convertirse en un emprendimiento sustentable y sostenible en el tiempo que beneficie a la economía local y su empleabilidad, impulsando acciones que hagan realidad la inclusión y el desarrollo integral de las personas".