Luego de 28 años y con entradas agotadas, Divididos volvió presentarse este sábado al Estadio Vélez Sarsfield, en el marco de la celebración por sus 35 años de trayectoria. 

 

Allí, Ricardo Mollo, Diego Arnedo y Catriel Ciavarella hicieron un repaso de sus grandes clásicos y estrenaron el tema "San Saltarín", un adelanto de su nuevo álbum de estudio.


Sin embargo, uno de los momentos más trascendentales de la jornada fue cuando apareció Chizzo Nápoli, quien se sumó a la aplanadora para interpretar "Sobrio a las piñas" y batirse un increíble duelo de guitarras con Ricardo.

 

Además, tras finalizar la canción, Divididos le cedió el escenario al resto de los músicos de La Renga para que puedan tocar "El final es en donde partí", en una suerte de acto de justicia por las trabas burocráticas que padece el trío de Mataderos para presentarse en la Ciudad de Buenos Aires.

 

"Es un honor estar acá festejando los 35 años con estos monstruos. Y es una emoción muy grande para mí estar tocando con esta guitarra, que fue la que me prestó Ricardo cuando grabamos Despedazados por mil partes", contó Chizzo, acompañado por Tanque y Tete Iglesias.