Los títulos públicos argentinos mantenían este miércoles su carrera alcista de precios, para alcanzar sus mejores cotizaciones desde mediados de febrero, ante compras especulativas de corto plazo por sus atractivos valores.
Los bonos soberanos en dólares con ley extranjera operan con una ganancia promedio de 1% en el día. Los Globales emitidos con el canje de deuda de septiembre pasado operan en un rango de precios entre los 34 a los 40 dólares.
El riesgo país de JP Morgan, que mide el diferencial de tasa de los bonos del Tesoro de los EEUU con sus pares emergentes, restaba a las 14:20 horas unas 17 unidades para Argentina, a 1.481 puntos básicos. Esta cifra es la más baja desde el 17 de febrero de este año.
El referencial bono del Tesoro de los EEUU a 10 años exhibía una leve baja en su rentabilidad, a 1,58% anual. Hay que recordar que la tasa se mueve en forma inversa a los precios, que suben debido a una mayor demanda en Wall Street.
Argentina ingresó en la víspera a un período de gracia de dos meses con el Club de París tras el vencimiento de una deuda por USD 2.400 millones, en momentos en que una fuerte segunda ola de COVID-19 impacta sobre una débil economía y el Gobierno mantiene conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar unos 45.000 millones de dólares.
“El Club de París requeriría al menos una misión del staff técnico del Fondo a Argentina para realizar una revisión del Artículo IV para aplazar el pago del préstamo”, recordaron los analistas del Grupo SBS.
“El Gobierno busca cerrar un aplazo del pago de la deuda (con el Club de París), con lo que desde el oficialismo denominan un ‘puente de tiempo’, al menos hasta alcanzar un acuerdo con el FMI”, refirió Portfolio Personal Inversiones en un informe.
El analista financiero Luis Palma Cané coincidió con que “el panorama es bastante claro, porque lo que hay que hacer en estos casos es acudir a la experiencia con el Club de París que -dicho sea de paso- fue constituido en 1956 a pedido de Argentina por un crédito que se había pedido después de la revolución de 1955. El Club de París en el vencimiento da automáticamente 60 días de waiver para cancelar. El tema es qué está pidiendo la entidad, que es ni más ni menos que lo escrito en sus estatutos: que para que un país pueda refinanciar deuda, la condición necesaria es un arreglo con el FMI, que juega a la vez de auditor”.
En las últimas seis semanas se observó una demanda más firme por activos financieros argentinos, que algunos operadores atribuyeron a que el mayor proveedor de índices del mundo, MSCI, definirá la semana próxima si el país continúa en su categoría de ‘Mercado Emergentes, o vuelve a ser de ‘Frontera’, situación que inhabilita a fondos externos a tener papeles argentinos en sus carteras.
Los bonos soberanos negociados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) caían en promedio un 0,2% en pesos, por tomas de ganancias, en una plaza con reducido volumen de operaciones.
“La deuda soberana dolarizada sigue luciendo barata a estos precios, aún descuenta una reestructuración agresiva en una próxima gestión”, estimó el agente de liquidación y compensación Neix.