No llegó a estar en la provincia ni 12 horas. Arribó en un vuelo privado en la siesta y se fue luego del encuentro en el Bicentenario. Se trata de la visita fugaz de Juan Román Riquelme, máximo ídolo en la historia de Boca, que vino por su cuenta a ver a su equipo ser finalista y no pudo concretarlo, ya que Patronato le aguó la fiesta al Xeneize.
No habrá sexta corona desde que asumió el exenganche como vice del club. Al menos por ahora. Luego del título del domingo, decidió acompañar al plantel, como suele hacer de visitante sólo por Copa Argentina. Se juntó con la delegación en la siesta y luego en el estadio observó el encuentro desde un palco. Casi sin tener contacto con los hinchas vivió el 1-1 y los penales. "Es un desafío importante porque nos mataron a goles en el torneo local", remarcó en el mediodía del miércoles en una entrevista con Radio La Red. Román hacía referencia al 0-3 por la Liga Profesional contra el equipo del Colorado Sava que jugará la próxima temporada en la Primera Nacional.
En esa nota radial, el Topo también reconoció sobre el futuro del DT, Hugo Ibarra, que "tiene chances de seguir el año próximo. Estamos muy contentos con él".
