Lucha en las alturas. Los dos jugadores tucumanos pueden más que Milton Casco, mientras Suárez observa la acción. River se la jugó hasta el final y le faltó sólo un gol para lograr la clasificación. Atlético Tucumán pasó a la siguiente instancia.

 

Emociones a granel. Hasta el último segundo. Hasta ese gol que impidió el arquero Luchetti en la última jugada del partido. River Plate lo dio todo. Pero no le alcanzó. Pagó un precio demasiado caro por ese gol que marcó Toledo en la primera parte del segundo tiempo. Porque ese gol significó doble para los tucumanos y el 4-1 no le alcanzó a River para clasificar luego de perder en el primer partido por 3-0.

Salió un partidazo de principio a fin. River tomó las riendas desde el mismo inicio. Encerró a los tucumanos en cercanías de su arco y atacó en forma constante. Recién a los 14 minutos pudo conseguir la primera diferencia. Fue a través de Nacho Fernández, que metió un tacazo para vulnerar el arco de Luchetti. Atlético Tucumán sintió el impacto pero no se preocupó en demasía porque todavía le tenían que hacer dos goles más.

Inclusive el visitante metió un par de contras que casi resultan letales. Tuvo protagonismo el arquero Armani pero a River le seguían faltando goles.

La cara de felicidad se le notó al técnico Gallardo antes que finalice el primer tiempo. Es que a los 41 minutos, Lucas Pratto recibió, se acomodó y con tiro bajo y entre las piernas volvió a vencer a Luchetti.

No puede. Nacho Fernández trata de sobrepasar la marca del jugador del equipo tucumano. El Millonario estuvo ahí nomás pero el gol de Toledo lo condenó.

 

Entonces River se fue al descanso mucho más esperanzado que al principio. Sólo le faltaba un gol para igualar aquel 0-3 en la ida.

El complemento largó con las mismas características pero a los 5 minutos la visita pegó el gran golpe. Tras un córner, la peinaron y Toledo la empujó al gol.

River tenía necesidad de meter cinco goles para pasar. Y empezó a buscar por todos los medios posibles. Pelotas en los palos, jugadas increíbles salvadas en el último instante y los tucumanos que seguían esperando que el tiempo pasara. A los 10", tras una jugada en conjunto, Suárez clavó el 3-1 y River empezó a creer que el milagro era posible. Más aún cuando a los 41 minutos, Pratto volvió a ganar de arriba y puso el 4-1. Explosión en el estadio. Todos creían más que nunca aunque faltaba poco.

El árbitro dio cinco minutos de descuento y River era una tromba. Los tucumanos estaban expectantes. Y el reloj pasó y el milagro para River no se dio. Le faltó sólo un gol, pero sus jugadores se retiraron ovacionados.

 

Conformismo generalizado

En los dos equipos se dio un conformismo generalizado. En los tucumanos porque lograron la clasificación. Toledo, el autor del gol del Atlético, dijo: "Sí es cierto, River nos dominó y ganó bien. Pero nosotros hicimos lo que teníamos que hacer, un gol. Y eso obligó a River a tener que hacer muchos goles. Seguimos firmes y creemos en nuestras fuerzas".

Enfrente, en River, Rafael Santos Borre, fue claro: "Nos faltó un gol pero dimos todo. A veces los nervios te juegan una mala pasada y encima tuvimos mala suerte porque varios tiros pegaron en los palos. Atlético pasó por aquel 3-0 que nos ganó en Tucumán. Pero creo que cumplimos aunque eso a veces no alcanza".

Pratto, a su vez, señaló: "Pusimos todo hasta el final. A veces no se te da. Por eso hay que pensar en el futuro. En la Copa Libertadores, por ejemplo. Es un duro golpe pero hay que asimilarlo y meterle para adelante".