El árbitro Germán Delfino, en compañía de una escribana, y el vicepresidente primero de Atlético Tucumán, Enrique Salvatierra, se presentaron ayer en el estadio Monumental para constatar el cierre de las instalaciones y dejar formalmente suspendido el partido ante River Plate, por la primera fecha de la Copa de la Superliga, lo que habilita a una sanción para el club de Núñez. De acuerdo al reglamento, River puede perder hasta 6 puntos por no presentación, a la vez que también será pasible de una multa económica.

Rodeados por la prensa y efectivos de la Policía de la Ciudad, el referí fue recibido por el gerente Rodrigo Pecollo en la puerta principal de acceso al estadio.

La escribana Marisa Galarza, especialmente enviada por la Superliga, recibió como respuesta que el Monumental permanecía cerrado por decisión institucional y dejó constancia de la presencia de los dirigentes de Atlético como muestra de voluntad para jugar el partido.

River había anticipado el viernes que no se presentaría a jugar por la emergencia sanitaria debido a la pandemia del coronavirus, lo que llevó su dirigencia a cerrar el club "por tiempo indeterminado" y licenciar al plantel profesional hasta nuevo aviso.

"Es la primera vez que me pasa algo así. Llegamos como siempre al estadio y ante esta situación de no poder ingresar se hizo el acta con la escribana. Ahora haremos un informe y luego tendremos que esperar lo que resuelva el Tribunal de Disciplina", explicó Delfino.

El árbitro liberó al plantel del club visitante a que se haga presente en Núñez, al considerarlo como un acto "innecesario" por el cierre del Monumental.

Sí especificó que en su informe adjuntará una planilla con los jugadores titulares y suplentes que iba a presentar Atlético Tucumán como lo indica el protocolo en esos casos.

 

  • Leito, a favor de cumplir el reglamento

El presidente de Atlético Tucumán, Mario Leito, fue comprensivo con la intención de los jugadores de parar la pelota debido a la emergencia sanitaria decretada en el país por el coronavirus, aunque priorizó su "responsabilidad" como dirigente y la obligación de jugar el partido finalmente suspendido ante River Plate.

"Entiendo a los jugadores, ellos tienen su posición, y yo tengo una responsabilidad como presidente. Lo primero que hay que hacer es cumplir con la norma, con los reglamentos, que nosotros mismos firmamos", declaró en oposición a los futbolistas y a sus pares de River.

"Hablé con el presidente (Rodolfo) D"Onofrio y me dijo lo mismo que decía el comunicado, que iban a preservar la salud de sus jugadores", comentó Leito.

El vicepresidente primero del club, Enrique Salvatierra, se presentó ayer en el Monumental y esperó la llegada del árbitro Germán Delfino. "Teníamos que cumplir con nuestra parte: esperar a los árbitros, mostrar voluntad de trabajar y quedar a disposición del reglamento", explicó.