Un fuerte golpe con algún objeto sirvió para partir una de las gruesas hojas de madera del portón, por el fondo, y dejar al descubierto la abertura para ver la barra metálica que la trababa por dentro. Lo demás fue un trámite: luego de destrabar la puerta, al menos un ladrón se dedicó a saquear lo que más pudo, máquinas, herramientas y accesorios valuados en unos 50.000 pesos. Lo llamativo del caso, fue que el necesario ruido que debieron causar con la destrucción del portón no fue percibido por un policía federal que custodiaba el lugar (la garita está a unos 50 metros, indicaron) y que el robo fuera descubierto por los propios empleados cuando se reintegraron a sus tareas en ese predio que el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) tiene en Calle 11, metros al Este del cruce con Vidart, en Pocito, informaron fuentes de esa entidad y voceros policiales.
El hecho trascendió ayer pero ocurrió durante la Semana Santa, entre las 15,30 del miércoles 28 de marzo y el reingreso al trabajo tras el fin de semana largo, el pasado 3 de abril, indicaron las fuentes.
La denuncia del caso fue realizada en la Seccional 7ma. de Pocito por responsables del INTA. Allí se dejó constancia que al menos un delincuente sustrajo una costosa máquina para coser bolsas plásticas, una bordeadora, una mochila para sulfatar, un taladro, una amoladora con 15 discos de esa máquina, tres llaves francesas, dos serruchos, cuatro escardillos, dos paquetes de electrodos de 2kg cada uno, pinzas, tenazas, martillos, al menos 7 llaves fijas, entre otras cosas. Varias de esas herramientas son marca Bahco, una de las más caras del mercado, indicaron voceros ligados a la investigación.