Rusia habría matado al líder de Estado Islámico, Abu Bakr al Baghdadi, en un bombardeo contra una reunión de líderes del grupo extremista a las afueras de su autoproclamada capital en Siria, Raqqa, en mayo pasado. La información no fue confirmada por ninguna otra fuente.
"Según informaciones que recibimos por diversos canales, el líder del Estado Islámico, Abu Bakr al Baghdadi, se encontraba en la reunión de jefes del EI" atacada por la aviación rusa "y fue aniquilado por el ataque" de los aviones rusos Su-35 y Su-34, informó en un comunicado el Ministerio de Defensa de Rusia.
En el ataque "también fueron liquidados otros altos jefes del grupo terrorista, integrados en el llamado consejo militar del EI, además de 30 comandantes de rango medio y unos 300 milicianos", aseguran los militares rusos.
A Al Baghdadi se lo apodó "el jeque invisible" por sus contadas apariciones y no es la primera vez que se lo da por muerto. De confirmarse, sería un importante éxito militar para Rusia, que desde septiembre de 2015 lleva a cabo una campaña de apoyo al presidente de Siria, Bashar al Assad.