Salió de la Escuela de Música, se perfeccionó con Rodolfo Mederos y desde 2003 es el bandoneonista del colectivo Bajofondo Tango Club. Con un trayecto destacado en las múltiples iniciativas del grupo de tango electrónico, regresará a San Juan para tocar este fin de semana en el Concierto de las Américas. Pero esta vez vendrá con el formato Bajofondo Remixed DJ Live Set, una variante que no tiene a Gustavo Santaolalla ni a Luciano Supervielle, y que se completa con Juan Campodónico en guitarra, Gabriel Casacuberta en bajo, Pablo Bonilla como DJ y Javier Casalla en violín. Ferres transita una carrera en plena expansión, con trabajos individuales en simultáneo, como fue el caso de Coldplay, con la que grabó la canción “Amor Argentina”, durante la gira que hizo la banda en La Plata en 2017. En la cuenta regresiva para el show, el artista habló con DIARIO DE CUYO.
– ¿Cuántas expectativas tenés por tocar en el Alcázar?
– Volver a San Juan con alguna propuesta musical me da una carga emocional importante. Por ser sanjuanino es movilizador para mí poder presentar mis proyectos. En esta oportunidad será algo nuevo, porque nunca toqué en el Alcázar, es un lugar tan emblemático que me produce mucha alegría. Bajofondo Remixed es un desprendimiento del proyecto madre que es Bajofondo, con ello profundizamos la conexión de la música electrónica y la música rioplatense.
– ¿Encontraron que la electrónica sea un puente entre varios géneros al parecer distantes?
– Lo que nos permite el lenguaje de la música electrónica, que pienso que es universal, es el poder mostrar de dónde venimos. No solo en el tango, la milonga, el candombe, sino también el rock y todo con el filtro nuestro, el Río de la Plata. Si bien el rock nos viene heredado, ya desarrollamos toda una estética, que tiene que ver con el lugar de donde venimos. Hay muchos elementos que, por este filtro, la música electrónica nos permite un lugar de homogeneización de todos esos sonidos para poder mostrarlos.
– ¿Por qué en algunos sectores más conservadores prefieran más la pureza y no ven virtuoso al sonido electrónico?
– Nunca levantamos la bandera de la renovación en un estilo en particular. Siempre tratamos de encontrar nuestra estética propia. Me parece importante la tradición, pero también poder experimentar con eso. Siento que las dos partes son interesantes y necesarias. Hay que explorar para que la tradición no quede trunca. Si las cosas están en un solo estado, tienen una sola vida. Nuestra misión es la búsqueda de pequeños elementos que atraigan a nuevas generaciones. En muchas ocasiones nos dijeron que gracias a escuchar lo que hacemos, empezaron a indagar más sobre Aníbal Troilo. Justamente me pasó lo mismo a través de Piazzolla, me puse a investigar todo lo que había antes de él: las viejas orquestas de tango. Siempre con respeto tratamos de desarrollar nuestro propio sonido y en este sentido, está la razón de este desprendimiento del proyecto madre. Nos transformamos en una banda con composiciones propias, con un estilo que llamamos bajofondístico y que tiene una identidad auténtica.
– ¿Piazzolla te marcó un camino como referente?
– Es muy difícil estar exento de él y escaparse de su influencia. Es un artista con una personalidad muy fuerte. Aunque también tenemos otras influencias como las de Eduardo Rovira, es quizás un músico que quedó a la sombra de Astor, pero también fue quien hizo una renovación importante con el bandoneón y con el tango. Lo que hizo Piazzolla fue apabullante, es casi imposible obviarla, pero nuestra exploración es amplia y no es nuestro único modelo de referencia.
– ¿Qué están haciendo en estos momentos Supervielle y Santaolalla?
– Realmente se dio un caso especial. No estamos tocando juntos ahora, porque estamos por sacar el nuevo disco de Bajofondo entre mayo y junio que viene, es un disco hermoso que estuvimos desarrollando durante cuatro años y se llama “Aura”. Como se presentó esta oportunidad del Concierto de las Américas, movilizamos cielo y tierra para poder estar presentes. Cada uno vive en ciudades distantes entre sí, no es tan sencillo juntarnos. Gustavo está a pleno terminando el disco y Luciano está con sus presentaciones en Montevideo y nos pareció valioso poder aportar lo nuestro en este espectáculo en Calingasta. Hice mucha presión para que se unan los planetas para viajar, es una oportunidad única y contento porque mis compañeros puedan conocer ese espacio. Tengo muchas ganas de tocar allá.
– ¿De qué manera el bandoneón ayuda a canalizar esta identidad musical ligada a tu historia?
– Desde que empecé a tocar al instrumento, siempre quise contextualizarlo en algo que tuviera que ver con la música contemporánea. Esa era mi misión, poder permitirme explorar otros mundos. Siento que es muy valioso y permite abordar distintas estéticas y eso le sigue dando vida. Puede estar en una banda de rock, puede funcionar en un grupo de folklore, de tango, de electrónica. Es un instrumento que se merece ser más explorado. No concibo mi carrera musical de otra manera diferente.
– ¿Con Bajofondo cuántas puertas se abrieron para vos?
– Al conocer a Gustavo y ser parte de esto, ampliamente fue mucho más de lo que había imaginado. Se fue dando de manera muy orgánica. Me vine a Buenos Aires con la idea de vivir de la música. Pero Bajofondo superó todos mis sueños. En esto hubo mucho trabajo, esfuerzo y también magia.
– Y en lo individual, ¿cómo va tu camino?
– El año pasado fue muy positivo para mí. Ser convocado para la dirección musical de la Fiesta del Sol fue todo un desafío. La experiencia que gané con Sueños de Libertad, Difunta Correa Amor de Madre y El Calor de lo Nuestro, fue compleja, pero satisfactoria. San Juan tiene mucho talento en muchas áreas, vive un momento artístico y cultural importante. Encontré músicos maravillosos que se están desarrollando, me pone feliz con lo que logramos con los espectáculos de la FNS, creo que dimos un gran paso en este sentido.
DATO
Bajo Fondo Remixed DJ Live Set. Concierto de las Américas, Calingasta. Sábado 13 de abril, con la participación de Los Jaivas y Ballet Nuevo Arte. 20 hs, entrada gratis.