Más allá de los atractivos naturales que ofrece San Juan, junto a sus circuitos turísticos con las tradicionales rutas del vino y del aceite de oliva, los atractivos culturales y deportivos y la buena oferta gastronómica y de hospedaje, quienes durante este receso de invierno han elegido llegar hasta esta provincia no han tenido dudas en señalar que otras de las cosas que más los han cautivado en esta tierra es la paz y la tranquilidad que pueden disfrutar en cada una de las actividades que realizan.
No se trata de la simple quietud o aburrimiento que en ocasiones caracteriza a algunos destinos, se trata de la posibilidad de disfrutar en un clima de concordia cada una de las propuestas que pueden desarrollar en esta provincia, sin mayores preocupaciones infundidas por temores o apuros propios de una sociedad agitada o convulsionada.
La paz social que reina en todo el ámbito provincial, sin manifestaciones de ningún tipo, ni paros o huelgas que puedan alterar los planes de los turistas es un factor que en la opinión de mucha gente que ha llegado a San Juan ha incidido para elegirla como destino de estas vacaciones de invierno que, por lo general, difieren de las de verano, respecto de que se busca un mayor relax a manera de recarga de fuerzas para terminar el año. Esta decisión es la que se ha visto reflejada en el 89%, en promedio, de ocupación hotelera y de los demás hospedajes del resto de la provincia.
Además de la tranquilidad, otros aspectos destacados por los turistas -que según el Ministerio de Turismo y Cultura proceden en su mayoría de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe- es la prolijidad y limpieza de la ciudad de San Juan y alrededores. Desde la plaza principal, 25 de Mayo, que se destaca por las excelentes condiciones en que se encuentra tras su restauración; el buen estado de las anchas veredas, que distingue a la ciudad Capital; las buenas condiciones de la mayoría de las calles recientemente repavimentadas y el esmero que se ha puesto en el diseño, cuidado y mantenimiento del Eje Cívico-Cultural que reúne al Teatro del Bicentenario, el Centro Cívico, el Centro de Exposiciones José Amadeo Conte Grand, el Centro de Convenciones Barrena Guzmán, el Auditorio Juan Victoria y el Museo de Bellas Artes, son lugares de mucha afluencia de público que se mantienen en óptimo estado para el disfrute de quienes los recorren.
En las afueras de la ciudad y camino a los departamentos alejados también hay muchos atractivos inmersos en un clima de paz y quietud que posibilita disfrutar de ellos a pleno como el paraje Difunta Correa e Ischigualasto que está batiendo récord con más de 20.000 turistas que han llegado hasta ese lugar. Lo mismo que los eventos deportivos y culturales que están teniendo lugar esta temporada como la reciente 8va maratón internacional de San Juan y la carrera de TC en el Villicum, denominada El desafío de las estrellas que se desarrolló el domingo pasado con absoluta normalidad y que todo el país pudo ver por televisión.
Más allá de que en la provincia surjan algunos problemas afines al turismo que habrá que ir puliendo en búsqueda de alcanzar la excelencia respecto a prestaciones y asistencia para quienes nos visiten, hay que potenciar las virtudes que los propios visitantes nos señalan ya que son las cualidades que se observan y sobre las que hay que trabajar para obtener el máximo aprovechamiento de la actividad turística que es motor de desarrollo económico.