Después de cinco temporadas llegó a su fin La Casa de Papel, la serie española con tuvo una respuesta muy modesta cuando la emitió Atresmedia y que se convirtió en un éxito mundial cuando Netflix subió las primeras dos temporadas y después produjo las tres restantes. La última parte del robo perpetrado por la banda de nombres de ciudades con caretas de Dalí y mono rojo, fue liberada el viernes obteniendo el aplauso de la crítica. Significó la despedida de personajes que generaron fervientes simpatías alrededor del globo, algo que era palpable en las redes sociales y en cada evento que organizaron con los actores que pasaron a tener una popularidad a nivel Hollywood.

En los últimos cinco episodios, mientras seguían intentando salir vivos del Banco de España, donde pretendían robarse 90 toneladas de oro por las tuberías, acechados por el ejército, el grupo enfrentaba el dolor por la muerte de Tokio (Úrsula Corberó). Con esa infinita pena la banda continúa adelante, hacen frente a los militares y conseguirá objetivo. 

La nueva. Nawja Nimri fue la más odiada cuando era la implacable inspectora Sierra, pero su rol cambiará. 

 

Esta resolución no fue del agrado de parte de algunos de los lectores de DIARIO DE CUYO, concretamente de los que respondieron a un sondeo en las primeras horas de lanzado el "Volumen 2". De 2.427 participantes, a la mayoría, un 77 por ciento, no le gustó el final: un 60% respondió que no le gustó porque le pareció cursi; un 17 % dijo esperaba más de la producción. Solamente el 23 por ciento de los que votaron dijo que sí les había gustado: de ellos, el 14% eligió la opción que consignaba que la banda "merecía ese final", cautivados por la resolución; mientras que el resto optó por la respuesta afirmativa pero opinaron que era un final demasiado irreal.

Otro interrogante era saber qué bando elegiría la inspectora Alicia Sierra (Nawja Nimri), cautiva del Profesor (Álvaro Morte), pero en la primera oportunidad se escapa, es perseguida y el captor será capturado. Sierra intentará una movida para limpiar su nombre, pero no le saldrá bien y será el Profesor quien la salve y ella en una especie de "matrimonio por conveniencia" se unirá a la banda. Aunque con el correr de los minutos se la notará compenetrada con el plan y su acción será clave para el éxito final, porque pierden el oro -sí, los ladrones son robados por la exmujer de Berlín- y ella quedará a cargo de la banda de apoyo cuando el Profesor se entrega junto a sus compañeros. El Profesor ha caído, pero en realidad no es más que otra forma de conseguir tiempo, en una jugada arriesgada, buscando salvar al grupo, salir ilesos y no sólo eso, sino libres de culpa y cargo. Lo que logrará, con algunos nuevos trucos.

La Casa de Papel consiguió traspasar la pantalla, sus actores se convirtieron en figuras internacionales y la historia, un símbolo de rebeldía, un concepto que algunos, disfrazados con la careta y el mono rojo, llevaron a protestas, eventos deportivos y hasta hubo ladrones reales que aprovecharon el fenómeno.