El lupus es una enfermedad en la que el sistema inmunitario ataca progresivamente a todos los órganos y a la que la ciencia médica no le ha encontrado la vuelta, hasta ahora. Un asombroso y carísimo tratamiento experimental conocido terapia CAR-T ha logrado la remisión del lupus en 5 pacientes.
Se trata de un revolucionario tratamiento que ha logrado en los últimos años curar completamente tumores de la sangre, como leucemias, linfomas y mielomas.
La terapia, denominada CAR-T, consiste en extraer sangre de los enfermos, modificar unos glóbulos blancos con ingeniería genética y volverlos a infundir, ya con una capacidad aumentada para destruir las células cancerosas.
El equipo del médico alemán Georg Schett ha logrado emplear esta revolucionaria estrategia contra el lupus eritematoso sistémico, una enigmática enfermedad autoinmune que afecta al 0,1% de la población mundial.
El mayor obstáculo para este tratamiento es el costo: En España, la farmacéutica Novartis cobra unos 320.000 euros por cada paciente. Pero abre una ventana a la cura de enfermedades potencialmente mortales.
En el estudio contra el lupus, cuatro mujeres y un hombre llevan hasta 17 meses sin síntomas y sin medicación, tras un único tratamiento con CAR-T. La inmunóloga española Carola García de Vinuesa, que no ha participado en el estudio, cree que los resultados son "absolutamente espectaculares".
El lupus golpea sobre todo a mujeres jóvenes. En las personas afectadas, el organismo produce anticuerpos que atacan sus propias células, en lugar de actuar contra infecciones externas.
El grupo de Georg Schett ha transformado unos glóbulos blancos, denominados linfocitos T, para que eliminen las células productoras de estos anticuerpos problemáticos.
El tratamiento, por el momento, ha conseguido borrar los síntomas del lupus, incluso la afectación de los órganos internos. Los autores consideran que sus datos indican que la terapia con CAR-T es "factible, tolerable y muy eficaz" contra el lupus eritematoso sistémico.
El inmunólogo estadounidense Carl June administró la primera terapia experimental con CAR-T en 2010. El enfermo, Bill Ludwig, era un funcionario de prisiones de 65 años que estaba a punto de morir por una leucemia. Apenas 20 días después, estaba limpio. Y, al cabo de una década, seguía libre de cáncer, tras aquella única infusión intravenosa de células CAR-T.
Unas 10.000 personas han recibido tratamientos con CAR-T en el mundo, principalmente contra el cáncer.