‘Mi hijo ha vuelto a nacer. Es un milagro que haya podido sobrevivir. Le doy gracias a Dios por tenerlo al lado a mío y con vida’. Marina Jofré agradecía tener vivo a su hijo Pablo (13), quien protagonizó ayer una peligrosa caída en el canal Perón, en Albardón.
Según el chico, caminaba con su hermana de 16 años y otros 12 amigos por la orilla de la ruta 40 de regreso a su casa en Chimbas cuando unos policías los detuvieron de manera agresiva. Ahí, Pablo se cruzó y se distrajo mientras seguía mirando el procedimiento.
Y en esa caminata cayó al caudaloso cauce. La fuerza del agua lo arrastró por debajo de puentes y gracias a sus gritos de auxilio, otros policías del Comando Radioeléctrico, de la Seccional 18va y de la Regional Oeste fueron a socorrerlo. Luego de 2 km de arduo esfuerzo y 3 intentos, lo rescataron ileso.
Pablo es el cuarto de seis hermanos que viven junto Marina en el Bº Los Cardos, Chimbas. El domingo en la noche, el chico, su hermana mayor y otros amigos fueron a la fiesta de Albardón. Cuando terminó, el grupo se fue caminando por el costado Este de la ruta 40.
Eso fue cerca de las 4.30. ‘Veníamos caminando y un patrullero se paró delante nuestro. Era una pareja y le pedían a un amigo que se sacara la mochila. Él solo llevaba una gaseosa y como no quiso sacársela, el policía lo agarró a patadas. Ahí me crucé’, contó Pablo.
El chico siguió caminando por la banquina Oeste y se cayó. ‘Empecé a gritar y mi hermana se escapó de los policías al escucharme.
Gracias a ella me salieron a buscar. No sé nadar, pero si flotar. Traté de agarrarme de las jarillas y cañas, pero se cortaban. Los policías me tiraron mangueras, pero se cortaban. Hasta que en el último intento, me engancharon del cuello y pude salir’, comentó el niño.
Salvan a una nena en una pileta
Guardavidas lograron reanimar a una nena de 4 años que se había golpeado y caído en el interior de una de las piletas del complejo Del Bono Beach, en el dique de Ullum.
Fuentes del Departamento de Naútica indicaron ayer que el incidente se produjo el domingo en la siesta en ese complejo. Al advertir que la pequeña se había sumergido, los guardavidas del lugar se arrojaron al agua y la sacaron inconsciente.
Los bañeros le dieron respiración y resucitación cardiopulmunar y lograron estabilizarla antes de trasladarla a un centro de salud.