Los usuarios podrán generar energía renovable para autoconsumo y volcar los excedentes a la red eléctrica pública, a partir de la reglamentación del régimen de generación distribuida que las provincias interesadas deberán adherir. Mediante el decreto 986/2018 el Gobierno reglamentó la ley 24.724 de "fomento a la generación distribuida de energía renovable integrada a la red eléctrica pública".
Desde la Secretaría de Energía estimaron en U$S 3.000 a 4.000 el costo de instalación de paneles solares en techos de domicilios y de U$S 25.000 a 30.000 en pymes.
El secretario de Energía, Javier Iguacel, estimó que el repago de los equipos no superará los siete años (cuando la vida útil supera los 30 años). Ese plazo, no obstante, "puede bajar a 3 o 4 años en provincias como Córdoba o Santa Fe, donde un usuario residencial paga en promedio una boleta de luz que triplica el valor de generación".
La medida era un paso necesario para aclarar cómo se utilizarán los incentivos fiscales y financieros del esquema que "cambiará la vida de los hogares", declaró días atrás el director nacional de Promoción de Energías Renovables, Maximiliano Morrone.
El decreto establece que la generación distribuida para autoconsumo se respaldará un mecanismo de medición neta, ya que los proveedores externos deberán tanto vender como comprar el fluido a los propietarios de generadores de energía renovable.
Se determinó además que las compañías distribuidoras estarán obligadas a facilitar la inyección de los eventuales excedentes domiciliarios y de pymes, surgidos básicamente de paneles solares, mediante el libre acceso a la red eléctrica.
Según los considerandos de la norma, "es necesaria una mayor diversificación de la matriz energética nacional y la mejora de las condiciones para la seguridad del abastecimiento de energía eléctrica".
El decreto considera que el régimen alentará, entre otros beneficios, la reducción de pérdidas en el sistema interconectado; la baja de los costos de generación de energía; y la protección ambiental.
Los pasos a seguir
Para que los usuarios instalen sus equipos generadores se prevé un análisis de viabilidad de conexión, en función de la red de distribución y sus características; la verificación de la instalación realizada; el contrato de Generación Eléctrica Distribuida, que vinculará a los distribuidores con los usuarios-generadores; y la instalación de equipo de medición bidireccional y conexión a la red.
En cuanto al Fondo para la Generación Distribuida de Energías Renovables (Fodis) creado por la ley para facilitar el financiamiento a los propietarios de viviendas y pequeñas y medianas empresas, tomará como base los criterios de tecnología, potencia y cantidad de usuarios del sistema eléctrico en cada jurisdicción, entre otros.
Mediante el Fodis se podrán realizar aportes de capital para promover de forma directa o indirecta el desarrollo de la generación distribuida, y establecer un precio adicional de incentivo a la energía inyectada o generada por el beneficiario.
El fondo también podrá bonificar el costo de capital para la adquisición de equipos y otorgar garantías o avales a favor de beneficiarios, proveedores de equipamiento o servicios, empresas de instalación y proveedores de capital o financiamiento.
Se contemplan asimismo políticas de promoción y fortalecimiento de la industria nacional de sistemas, equipos e insumos para generación distribuida de energía a partir de fuentes renovables.
Las firmas encuadradas en el régimen de Fomento para la Fabricación Nacional de Sistemas, Equipos e Insumos (Fangised) podrán obtener certificados de crédito fiscal y tendrán la posibilidad de realizar la amortización acelerada del impuesto a las Ganancias, así como obtener la devolución anticipada de IVA. También tendrán acceso al financiamiento de la inversión con tasas preferenciales y al Programa de Desarrollo de Proveedores.
Las claves del Programa
El objetivo principal
El objetivo de este plan es llegar a los 1.000 MW instalados en 2030 (2,8% de la potencia total actual). Por eso el Presupuesto 2019 prevé subsidios por $500 millones para la compra de equipos y otros $300 millones de exenciones fiscales para que las pymes instalen este sistema".
Lo que falta resolver
El subsecretario de Energías Renovables, Sebastián Kind, aclaró que la reglamentación de la ley 24.724 deberá ser seguida por otras medidas aclaratorias (una resolución y disposiciones) y también para que puedan adherir las provincias interesadas en desarrollar el sistema.
Un salto exponencial
La tasa de crecimiento de la generación distribuida puede ser exponencial. En Brasil el sistema se multiplica por dos o tres veces cada año y en Australia, que inició su instalación hace 10 años, incluye a un cuarto de los hogares con 1,8 millones de equipos y 7.000 MW de potencia.