Bastones, chips, a la española, cerillas, pay, onduladas, en dados, en gajos. Son múltiples las opciones de cortes de papas, que combinadas con el calor del aceite y la medida justa de sal según cada comensal, es ideal para acompañar cualquier platillo o solas.
Si bien no existe un motivo especial por el cual se designa al 20 de agosto como el Día Mundial de las Papas Fritas, nadie duda que es una de las comidas favoritas del mundo entero y solo por ese motivo, merece tener su día.
Las papas fritas constituyen uno de los platos más populares de la gastronomía, que encanta a grandes y a chicos. Su preparación parece no ser algo complicado, ¿Qué tan difícil puede ser cortar un poco de papas y ponerlas en la sartén con aceite? Si lo vemos desde ese lado, no representa dificultad, pero como todo manjar, tiene sus secretitos, ¿te animas a probarlos?
La importancia de una buena papa
La calidad de la papa elegida es directamente proporcional a la papa frita que vamos a obtener. Es importante descartar las papas que estén blandas o un poco verde, ya que en vez de quedar crocantes, terminan fofas ya que se ablandan rapidísimo.
Un remojo necesario
Con o sin cáscara, lo importante es lavar bien las papas antes de cortarlas como más nos guste y, antes de sumergirlas en aceite, deja las papas en remojo en agua fría. De esta manera podrás deshacerte del almidón. Lo recomendable es que estén al menos 30 minutos, aunque algunos ansiosos no tienen ese tiempo. Lo importante es que el agua salga limpia, por ende puedes lavarlas varias veces. No olvides secarlas bien, o saltará aceite por todos lados cuando coloques las papas en la sartén.
Doble fritura
Esta técnica la desconocía. Muchos seguramente cortamos las papas, las tiramos en la sartén, esperamos a que estén doradas, un poco de sal y a la boca, pero ¿sabías que quedan más sabrosas y crocantes si las fríes dos veces?
El truco es freír las papas en un aceite no muy caliente y esperar que estén algo doradas. Sacas las papas, esperas unos minutos que aumente la temperatura del aceite y vuelves a freírlas. Tendrán la consistencia y el toque crocante de las fritas hechas por un profesional.
Frito, frío, frito
¿Sabías que si congelas las papas con la primera fritura quedan mejor? En el freezer, el agua que contienen las papas se convierte en hielo, destruyendo las estructuras celulares. Esto deja un interior cremoso y un exterior con mejor coloración y textura. 20 minutos es tiempo suficiente para lograr este efecto.
Si dudas de esto, recuerda que las papas compradas congeladas ya pasaron por la primera fritura. Seguro querrás probar este tips.
La sal al final
En varios sitios web seguramente recomiendan salar las papas antes de freírlas, pero lo mejor es colocarle sal al final. De esta manera evitas que las papas se ablanden y no excedes la cantidad de sal necesaria para que queden deliciosas.
BONUS TRACK
Para que tus papas fritas queden “de re chupete”, no olvides extraer el sobrante de aceite con servilletas de papel, ya que son más absorbentes. Además, en la medida de las posibilidades utiliza aceite de oliva para freír, que es más sano, aunque el aceite de girasol es una excelente opción también.
Para saber que el aceite está en su punto ideal, más que nada en la segunda pasada, tira un poquito de miga de pan, espera que suba a la superficie y comience a dorarse. Si el pan se hunde al fondo de la sartén u olla, significa que el aceite aún está frío, si la miga toma color muy rápido al punto de quemarse, es porque el aceite está muy caliente. Deberás bajar la llama del fuego y esperar unos minutos para que enfríe.
Cuando el aceite tome la temperatura ideal, lo único que resta es colocar las papas cortadas y controlar para que no se quemen. Sacar, salar y …Bon Appétit!!