El ex ministro de Planificación Federal y actual diputado nacional, Julio De Vido, enfrentará este miércoles el primer juicio oral en su contra por la tragedia ferroviaria de Once, proceso en el que está acusado de delitos que pueden ser castigados hasta con 11 años de prisión, mientras el Tribunal resolvió que haya dos grupos de querellantes en el debate.

 

Los jueces Néstor Costabel, Pablo Bertuzzi y María Gabriela López Iñiguez decidieron que habrá dos grupos de querellas, en vez de las cuatro iniciales, en representación de los familiares de las víctimas y sobrevivientes.Al resolver unificar en dos grupos a las querellas, el Tribunal rechazó además un planteo de "suspensión del inicio del debate" hecho por una de ellas, que se sumó a la negativa de ayer a postergar el inicio del juicio, contra lo que había pedido la nueva defensa legal de De Vido.

 

Uno de los grupos querellantes será encabezado por el abogado Javier Moral y el otro por Lelia Leiva y Leonardo Menghini, según lo decidido por el Tribunal Oral Federal 4 a un día del inicio del que será el primer juicio contra De Vido por los delitos de "estrago culposo agravado" y "administración fraudulenta".

 

De Vido será juzgado junto al ex titular de la Unidad de Renegociación y Análisis de Contratos de Servicios Públicos, Gustavo Simeonoff, en el debate que tendrá lugar en la sala AMIA, ubicada en el subsuelo de los tribunales federales de Retiro.

 

Todos los miércoles

 

Las audiencias serán los miércoles desde las 9.30 y el Tribunal convocó a 84 testigos, aunque se prevé que muchos podrían ser desistidos a lo largo del juicio, que se extenderá hasta el primer semestre del 2018, según estimaron fuentes judiciales.Para hoy se prevé la lectura de los requerimientos de elevación a juicio con las acusaciones a ambos ex funcionarios y, luego, si dan los tiempos, se comenzará con el planteo de las llamadas cuestiones preliminares a resolver por el tribunal, antes de las declaraciones indagatorias.Para esta jornada y hasta que finalicen sus indagatorias -en las que podrán o no aceptar hablar- De Vido y Simeonoff deberán estar presentes y sentados en el banquillo de los acusados.El Tribunal pidió montar un operativo de seguridad en Comodoro Py 2002 ante una manifestación de familiares, prevista para los momentos previos al inicio del debate.Por ello se prevé convocar a la Unidad de Intervención Territorial y a la división Antiexplosivos de la Policía Federal.De Vido llegará con sus nuevos abogados, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, luego de la renuncia de su equipo de defensa en la semana previa al inicio del debate.

 

Lo que pasará hoy

 

La primera jornada se dedicará a la lectura de los requerimientos de elevación a juicio del fiscal federal Federico Delgado, la Oficina Anticorrupción y las querellas de los familiares de víctimas de Once. Luego será el momento de los planteos preliminares, para después comenzar con la convocatoria de testigos, en un orden que determinará el Tribunal.

 

En total, fueron convocadas 84 personas, entre ellas el ex ministro de Interior y Transporte del kirchnerismo luego de la tragedia, Florencio Randazzo; el ex ministro de Economía Roberto Lavagna y el ex titular de la Auditoría General de la Nación Leandro Despouy.

 

Según explicaron fuentes judiciales, los jueces analizan citar primero a quienes ya declararon en el primer juicio por la tragedia de Once, en el que resultaron condenados los ex secretario de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, el empresario de la concesionaria TBA Sergio Cirigliano y el maquinista del tren, Marcos Córdoba, entre otros.

 

La idea es realizar nuevas preguntas que se diferencien de las hechas en el debate que se realizó en 2015, y que estuvo a cargo de otro tribunal, el Oral Federal 2. En ese juicio fueron condenados 21 procesados por el choque del tren del ex ferrocarril Sarmiento en la estación de trenes de Once el 22 de febrero de 2012, que causó 52 muertos y cientos de heridos.

 

Entre ellos, están Cirigliano, responsable de la concesión otorgada a Trenes de Buenos Aires (TBA), quien recibió 9 años de prisión; el ex secretario de Transporte Jaime, a seis años; su sucesor Schiavi, a ocho años de cárcel, y el maquinista Córdoba, a 3 años y seis meses. Salvo Jaime, preso en otras causas por delitos de corrupción, los demás condenados siguen libres porque la Cámara Federal de Casación aún revisa la sentencia del Tribunal Oral Federal 2, y fijó una audiencia preliminar para el próximo 11 de octubre.