El escandaloso caso del preceptor del colegio privado Santa María que recibió una brutal golpiza por parte del padrastro de una alumna de 15 años sigue levantando polémica. La madre de la menor lo denunció (la niña aún no declara) por acosarla sexualmente luego de ver los mensajes que le mandaba el acusado Jorge Cruceño (por ahora separado de su cargo). Ayer se hicieron públicos los supuestos mensajes obscenos que le mandó a la menor, pero desde el entorno del también docente dijeron que son falsos. Es más, hasta deslizaron que pudieron ser parte de una aplicación que sirve para fingir conversaciones.
En el mismo sentido, la abogada defensora de Cruceño, María Filomena Noriega, negó que su cliente haya perpetrado delito alguno, al manifestar públicamente ayer que "no me consta lo del chat. En el interrogatorio con mi cliente, me demostró que no existen los mensajes". La letrada agregó que "nos hemos puesto a disposición de la Justicia. De hecho se aportó su teléfono personal para demostrar que nunca hubo mensajes de esas características. Pediremos Cámara Gesell a los compañeros y que declaren también los padres, porque estamos seguros que no hubo acoso". Noriega además sostuvo que "a lo mejor la menor pudo haber tergiversado un trato cotidiano y ameno".
Lo cierto es que ayer las imágenes del feroz ataque que recibió el preceptor cerca de las 13.30 del último lunes dieron la vuelta por el país. Diferentes portales nacionales y también canales de televisión reprodujeron el video en donde se puede ver cuando el padrastro de la adolescente aborda al acusado en la sala de ingreso al colegio del barrio San Martín, en Concepción, Capital. Cruceño terminó con un profundo corte en su pómulo izquierdo y numerosos golpes en la cara y la cabeza, y tuvo que recibir asistencia médica. Incluso ayer desde su entorno dijeron que continuaba muy dolorido y que no se descartaba que la visión de su ojo izquierdo quedara afectada.
Además de tomar justicia por mano propia, desde la familia de la alumna en un principio denunciaron los presuntos abusos en el ANIVI.
Para anticiparse a un hipotético pedido de detención, la abogada de Cruceño aseguró que ya presentaron ante la Justicia una eximición de prisión.
Sin embrago, el que ahora la tiene complicada es el padrastro, no identificado por la Policía. Tras el ataque que sufrió de su parte, el preceptor lo denunció en la comisaría 2da por lesiones y al sujeto ya lo notificaron para que se presente a indagatoria. Pero hasta anoche no lo hacía y era buscado por los uniformados, dijeron fuentes policiales.
Mientras, en la Justicia siguen trabajando para esclarecer el caso. Los teléfonos de los involucrados ya están a disposición para que sean peritados. Este paso será clave para determinar la veracidad de los supuestos contactos que mantuvieron. Y también para conocer si la versión que deslizaron desde el entorno del acusado, que los chats son falsos, es real. Por otro lado, se espera que la semana que viene la adolescente sea entrevistada por los psicólogos del ANIVI. Ahí se sabrá si existió o no algún delito y si Cruceño debe o no ser investigado.
El preceptor corre el serio riesgo de perder la vista del ojo izquierdo.