Teniente Nicolás Plantamura.

 

 

Por Martín Andrés Carelli
Profesor de Historia. Docente de la UNSJ, miembro de la Junta de Estudios Histórico de San Juan. Montañista.

Hoy, 20 de noviembre, se celebra el "Día de la Soberanía Nacional Argentina", en conmemoración de la batalla de "Vuelta de Obligado", de 1845. En aquel entonces, los heroicos soldados argentinos, en inferioridad de condiciones, resistieron la invasión del ejército anglo-francés, el más poderoso del mundo. Con la finalidad de colonizar territorios de nuestro país, durante 1845, Francia e Inglaterra emprendieron una ofensiva con una flota de 95 navíos de carga, repletos de productos para ser colocados en la provincia de Corrientes y en el Paraguay. El pueblo argentino no deseaba volver a ser una colonia, por lo que el gobierno de Juan Manuel de Rosas, respaldado desde el exilio por el general José de San Martín, preparó una resistencia. Los invasores querían entrar por el Paraná, pero las tropas nacionales, al mando de Lucio Mansilla, se anticiparon en un estrecho recodo de ese río: la "Vuelta de Obligado". El número de fuerzas enemigas superaba en cantidad y modernidad de su armamento a las argentinas, que sin embargo no se amedrentaron y batallaron durante siete horas. De este modo, lograron que las tropas adversarias no pudieran ocupar las costas, objetivo necesario para poder adentrarse en el territorio argentino. Esta resistencia, así como también el espíritu de lucha nacional, se conoció en toda Europa y quedó inscripto en nuestra historia como un símbolo de independencia, libertad y unidad nacional.

Casi un siglo después, sucedió un hecho histórico en el que por primera vez, un argentino proclamó soberanía en el Cerro Aconcagua. Todo ocurrió en el año 1934, cuando desde Italia parte una expedición a la Cordillera de los Andes, bajo la experta dirección del conde Aldo Bonacossa. Los miembros del grupo que se dirige al Aconcagua son: Renato Chabod, Pablo Ceresa, Esteban Ceresa y Pedro Ghiglione. A ellos se les agregan como invitados el entonces teniente Nicolás Plantamura (del Regimiento 16 de Infantería de Montaña con asiento en Mendoza), Carlos Anselmi, Federico Lance Ortiz y Federico Strasser. Como arriero, el chileno Mario Pastén. El 26 de febrero de 1934 parten desde Puente del Inca con destino a Plaza de Mulas, donde establecen el campamento base. El 6 de marzo de 1934, el grupo se interna en el Valle de Horcones, llega a Plaza de Mulas por la noche. El día 7 continúa la ascensión a lomo de mula hasta los 5.750 metros. El 8 de marzo: seis son ahora los hombres: Chabod, Pablo Ceresa, Esteban Ceresa, Ghiglione, Plantamura y Pastén. A las 7.30 horas recomienza la larga jornada. Y culmina encaramándose en el Techo de los Andes. Son las 12.30 horas del 8 de marzo de 1934. Una intensa emoción invade a los hombres: el teniente Plantamura es el primer argentino que triunfa en el máximo pico de América.

Nicolás Plantamura nació en la ciudad de Mendoza el 8 de noviembre de 1907. Ingresó al Colegio Militar de la Nación en el año 1925. Egresó como subteniente de Infantería, el 22 de diciembre de 1928. Entre sus destinos figuran el Regimiento de Infantería 19, Regimiento de Infantería de Montaña 16, Comando del Destacamento Cuyo, Regimiento de Infantería de Montaña 21, Escuela Superior de Guerra, Comando del Primer Destacamento de Montaña, director de la Escuela de Tropas de Montaña. Se retiró con el grado de general de Brigada, a principios de 1957. Falleció en la ciudad de Buenos Aires el 7 de junio de 1976. Sus restos descansan en el Cementerio de los Andinistas de Mendoza. Sin dudas, un hombre que trabajó por la soberanía nacional.