El Ciclón sacó una ventaja vital en un primer tiempo sin demasiados sobresaltos. A los 11 minutos, de contraataque, Nicolás Reniero apareció por derecha, cambió de frente para Nicolás Blandi, éste le devolvió el balón y, de cabeza, El Príncipe venció a Nereo Fernández.
Pero en el complemento, los de Boedo desaparecieron del mapa. Afortunadamente para ellos, quedó bien firme Nicolás Navarro, quien fue el artífice de que, al menos, pudiera conservar un punto de los tres con los que llegó al descanso.
A quemarropa ante Franco Troyansky y Franco Soldano, otra vez ante Troyansky… El arquero azulgrana tuvo su momento máximo a los 27, cuando tras un polémico penal de Víctor Salazar, le tapó el tiro desde los doce pasos al ingresado Rodrigo Gómez.
Pero el Tatengue no se rindió, Diego Zabala tuvo otra chance que se perdió cerca y, a los 45, envió el centro desde la derecha que Fabricio Coloccini no pudo cortar y que Franco Fragapane sólo tuvo que empujar por la izquierda para el merecido empate.
Al final, para no perder la costumbre, Navarro volvió a lucirse ante un cabezazo de Soldano. Así, San Lorenzo redondeó otra igualdad que, al final, no le supo a tan poco.