Viven en forma muy austera, alquilan en una zona humilde de Chimbas y apenas les alcanza para comer. Como si no fuese suficiente con esto, encima les roban lo poco que tienen. Así es la triste situación de un obrero de la construcción, su mujer embarazada y sus dos niños, quienes dejaron su casa por unas horas para ir a visitar a un abuelo enfermo y en ese lapso sufrieron un “escruche” en su casa.
En noviembre del año pasado también habían entrado a robar a esa casa ubicada en la esquina de las calles Díaz y Centenario, pero por esas casualidades César Fernández (24) regresó a la vivienda y evitó que unos ladrones se llevaran el lavarropas y el secarropas. Este fin de semana largo, no tuvieron la misma suerte. Desconocidos entraron cuando él, su mujer Micaela Andrada (22) y sus dos nenes no estaban.
Fue de noche, entre las 22.30 y las 3. Los delincuentes destrozaron una puerta de chapa y entraron a la humilde vivienda para robar lo que había a mano. Sustrajeron la garrafa de la cocina y el regulador de gas, un televisor viejo de 21 pulgadas, el lavarropas, el secarropas, un equipo de música y un bolsón con leche, aceite y otras mercaderías que les habían regalado a Micaela. Para ella, que está embarazada, es mucho. “Nos robaron lo poco y nada que teníamos y que habíamos conseguido por medio de nuestras familias. No sé qué vamos a hacer ahora. A mi marido (por Fernández) le dijeron que a lo mejor en una semana se queda sin trabajo y tenemos los últimos 100 pesos para comer hasta que le paguen la quincena”, explicó.
Ataques en otras dos viviendas
En otro ataque tipo “escruche”, delincuentes se llevaron 7.000 pesos en efectivos, tres camisetas deportivas, un secador de cabello y hasta perfumes de una vivienda del barrio Jardín 2 de Agosto, en Rivadavia, informó la Policía. La damnificada fue Florencia Cortez, que vive junto a su familia en la manzana D de ese barrio, señalaron las fuentes.
También entraron a robar a una casa situada en las calles Aberastain y Sarmiento, en La Cañada, Albardón. Fuentes policiales informaron que el hecho fue denunciado por Silvia Durán, quien contó que se ausentó de su casa en horas de la siesta y ladrones violentaron una de las puertas. Sustrajeron un televisor Led, una tablet, un celular, una licuadora, una garrafa de 10 kg y otras cosas, señalaron.