’La fe todo lo puede’, dijo el hombre antes de que le asomaran las lágrimas. No pudo evitar emocionarse cuando vio aparecer la imagen de Cura Brochero a quien le atribuyó un ‘milagro’.
Se trata de Odulio Carrizo, un puestero de Ullum, quien dijo que su hijo se fracturó una mano y que gracias a este santo pudo recuperarse sin tener que someterse a una cirugía como le prescribió el médico. En agradecimiento, el hombre le construyó una gruta donde ayer colocaron la imagen de Brochero que llegó en caravana hasta el puesto.
Carrizo contó que hace un mes Jorge, uno de sus hijos, llevó un par de animales a pastar como lo hace habitualmente, pero sufrió un accidente en el camino.
‘Tomó un atajo por entre los matorrales y no vio el pozo que había en medio de la huella. Se cayó y se quebró la mano derecha. Regresó sin poder ni siquiera mover el brazo’, dijo el hombre.
Al día siguiente el joven fue al médico, quien le dijo que debía someterse a una cirugía para recobrar la movilidad de la mano. Fue entonces que las ‘súplicas’ a Brochero dieron resultado.
‘Le recé y rogué al santito que lo sanara para que no tuviera que sufrir con una operación. Le prometí que si lo hacía le construiría una gruta acá en el puesto para que la gente que quisiera le viniera a rezar.
Al otro día mi hijo amaneció con la mano completamente sana como si nunca le hubiera pasado nada. Y le cumplí la promesa’, agregó el puestero.
Tras contactar a Nilda Morales, quien fue la gestora de que el Cura Brochero llegara a Ullum, Odulio consiguió que le donaran una imagen.
Pero eso no fue todo. Los brocherianos ulluneros organizaron una caravana y cabalgata para llegar con Brochero hasta el puesto de Agua de las Chilcas donde vive Carrizo.
Ni el calor ni la distancia impidieron que los fieles seguidores del Santo llegaran a destino.
Tras más de una hora de recorrido a lo largo de 5 kilómetros de huella casi intransitable, los brocherianos llegaron al puesto que está en la cima de un cerro.
Allí los esperaba Odulio que les dio la bienvenida con un aplauso. Y no pudo evitar volver a emocionarse. Ni bien le entregaron la imagen de Brochero se persignó y luego le dio un beso, antes de colocarlo en su nuevo hogar. ‘Le hice la gruta con piedras del cerro como a él le hubiera gustado’, dijo mientras dejaba la imagen en su interior.
Llegó la noche y los brocherianos no se retiraron del lugar. Se quedaron para compartir con el puestero una cena a la canasta y una guitarreada para que el evento se convirtiera en una verdadera fiesta de fe.
Con las primeras luces del día emprendieron el regreso, luego de compartir un desayuno bien de campo. Prepararon mate cocido con cedrón y semitas caseras para todos.
Recorrido
10
Fue la cantidad aproximada de kilómetros que recorrió la caravana que partió del barrio Dique I para llegar hasta el puesto Agua de las Chilcas que está en la cima de un cerro desde donde se ve el dique.
Fieles acompañantes
Ayer los devotos del Santo Cura Brochero participaron de la caravana en diferentes medios de transporte. Algunos lo hicieron en auto, mientras que otros lo hicieron a caballo y carretela. Hubo varios que se animaron a recorrer la huella en moto. Fueron los jóvenes que también quisieron demostrar su fe en el Santo.
La peregrina de Brochero
Nidia Morales no sólo fue la encargada de traer la primera imagen de Cura Brochero a Ullum donde vive. Prometió traerlo si se terminaba la ola de ‘suicidio’ entre los jóvenes del pueblo. Dijo que el Santo escuchó sus plegarias.
Por eso, ahora también se encarga de peregrinar con su imagen por los hogares donde necesitan su bendición. ‘Brochero no es para estar encerrado, sino para recorrer los lugares donde más lo necesitan.
Por eso yo llevo su imagen a dónde la piden. A mí no me molesta hacerlo porque de esta manera siento que los acompaño en su misión’, dijo.