Ocurrió durante la siesta del 1 de abril pasado. La nena, hija de ella, jugaba afuera y ambos estaban en la cama, cuando a él se le ocurrió tener sexo. La joven estaba por levantarse pero él la retuvo por la fuerza, le sacó la ropa y la sometió. ‘¡Mirá cómo me dejaste!‘, le recriminó la chica, pero él pareció minimizar todo y la desafió: ‘Qué, me vas a denunciar. Soy tu pareja y tenemos sexo… ¿vos pensás que te van a creer?‘, le dijo.
Tres días después ella accedió a tener relaciones sexuales, pero el 6 de abril, por la noche, volvieron a tener otro cruce mientras tomaban mate. Según la denuncia, esa vez el joven se puso celoso y se molestó por algunos mensajes en Facebook y entonces ella decidió poner fin a la situación y también a la relación: ‘Si tanto te molesta te doy el celular, pero te vas de la casa‘, lo intimó. Y enseguida ese muchacho de 20 años, de apellido Corzo, juntó sus cosas y partió.
Según fuentes del caso, ese día terminaron dos años de relación que la denunciante, de 19 años, describió como muy conflictiva a causa de las agresiones físicas, verbales y psicológicas de quien era su pareja. Al punto de que ya lo había denunciado en 2018 aunque reinició la relación con él ya que -explicó- su nena lo extrañaba.
Pero esta vez la situación iría más allá de la ruptura de la relación. El 9 de abril pasado ella denunció a su ex en la Policía por haberla violado, y enseguida se ordenaron una serie de pruebas, como un examen médico en el que se constató la presencia de lesiones en sus genitales, indicaron los voceros.
Al conocer el resultado de esas pruebas, el juez de Instrucción Guillermo Adárvez ordenó a la Policía concretar la detención de Corzo. Y esa captura ocurrió el último jueves en Rawson, indicaron voceros del caso. Ahora, el joven tendrá la oportunidad de defenderse y dar su versión de los hechos, cuando sea indagado, sospechado de haber cometido un grave delito sexual.