Un informe elaborado por la Subsecretaría de Trabajo de la provincia reveló que, por la mayor actividad económica que se registra ahora luego del parate por efecto de la pandemia en el 2020, durante el primer cuatrimestre de este año, comparado con igual período del año pasado, crecieron un 18% las denuncias laborales en el organismo. De enero a abril del 2020 se habían registrado un total de 409 planteos y este año la cifra ascendió a 482. De las quejas, alrededor de un 80% corresponden a irregularidades en el pago de los sueldos al personal, según detalló Jorge Oribe, titular de la repartición.

El sector que encabeza los planteos es el comercial, por cuestiones que tienen que ver con demoras en el pago del sueldo o la cancelación en cuotas. En segundo lugar está el servicio doméstico, por ejemplo por situaciones en las que el empleador quiere prescindir del servicio de la empleada, pero no llegan a un acuerdo sobre el monto de la indemnización. Es cuando toma intervención la Subsecretaría de Trabajo. Y en tercer lugar está el sector gastronómico, también por irregularidades en los pagos.

En cuando a las causas, además del tema salarial, que lidera el rubro con el 80% de las denuncias, siguen las cuestiones relacionadas con la higiene y seguridad, con un 15%. Por ejemplo por falta de elementos para cuidar al personal del Covid-19, como puede ser el alcohol en gel, o por falta de entrega de ropa de trabajo adecuado a la actividad que desempeña el empleado.

En último lugar están las cuestiones referidas a la falta de reconocimiento a afecciones médicas (5%).

"Lo que hacemos desde la subsecretaría es una mediación en este tipo de conflictos para tratar de solucionarlos con una prioridad, que es mantener las fuentes de trabajo", dijo Oribe.

Cuando un obrero u empleado tiene un problema en su trabajo o percibe que sus derechos están siendo coartados, puede concurrir a la Subsecretaría de Trabajo, sobre calle Santa Fe, pasando Mendoza, y presentar un reclamo, que debe ser por escrito. Será considerado individual si solamente corresponde a un empleado, o colectivo cuando se trata de un grupo de trabajadores con representación gremial. Por último, será pluri individual cuando la inquietud corresponda a un grupo de empleados, pero que no cuentan con patrocinio sindical.

El expediente pasa a la Dirección de Relaciones Laborales y puede ocurrir que haya una inspección a la empresa cuestionada. En el lugar se procede a labrar un acta de constatación para determinar si existe alguna irregularidad y luego se cita a la empresa para el descargo.

También puede haber una audiencia de mediación. En una o varias reuniones, y luego de escuchar a las partes, se trata de llegar a un acuerdo que beneficie ambas partes. Y lo que se decida, y para ello se labra un acta, es de cumplimiento obligatorio en la actividad, para evitar sanciones. Si no hay un acuerdo, el empleado puede acudir a la Justicia laboral.

En el 2019 se habían registrado 461 denuncias y ahora crecieron por el crecimiento de muchas actividades, que el año pasado se habían visto afectadas por las medidas del Gobierno nacional para frenar la pandemia.