El concierto que iba a dar L-Gante el sábado 9 de octubre por la noche en el estadio de Juventud Pueyrredón de Venado Tuerto se suspendió por una situación insólita. Es que, según los organizadores, debieron tomar esa decisión por una serie de pedidos que hizo el artista y no se llegaron a cumplir.

La noticia se dio a conocer a través de un comunicado en el que los empresarios santafesinos explicaron el motivo: “Por requerimientos materiales enviados por el artista L-Gante el día jueves y a última hora, y siendo este víspera de feriado nos vemos imposibilitados a conseguir dichos elementos”.

"Por eso estamos obligados a suspender el recital que se iba a llevar a cabo el día 9 de octubre de 2021 en la ciudad de Venado tuerto. Para la devolución de las entradas comunícate con tu vendedor. Las mismas se llevaran a cabo desde el día martes 12/10/2021. Sepan disculpar las molestias ocasionadas”, agregaron en el escrito.  

Y lo que parecía ser una simple suspensión se convirtió en una situación polémica cuando, tras la noticia, se filtró la lista de requerimientos que el artista hizo en cuanto al sonido, la escenografía y, sobre todo, al camarín.

La lista de pedidos incluye cuestiones técnicas y lógicas como los micrófonos, parlantes, consolas y monitores.

Mientras que los pedidos del camarín son mucho más extravagantes: agua, bebida energizante, sándwiches de miga, tabla de quesos y fiambres, toallas nuevas de mano blancas, un espejo de cuerpo entero, una PlayStation 5, una televisión de 55 pulgadas, un whisky Jonnie Walker etiqueta negra y 2 champagne Barón B.

La cancelación hizo estallar las redes con comentarios en contra de la productora y contra el mismo L-Gante. Y si bien desde la producción aseguraron que la causa de la cancelación fue el pedido del artista, otros indicaron que podría haber sido la escasa venta de entradas, que costaban 2 mil pesos.  

 

Fuente: Clarín