El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, sufrió ayer una descompensación producto de un cuadro de lipotimia, en pleno discurso inaugural de un nuevo período de sesiones ordinarias de la Legislatura provincial.
El episodio, que se extendió durante unos cinco minutos, ocurrió sobre el final de la exposición, cuando el gobernador cordobés comenzó a bajar la intensidad de su voz y a palidecer. Sus colaboradores, que advirtieron la situación, lo ayudaron para que pueda restablecerse de su problema de salud.
El mandatario provincial recibió asistencia de dos médicos y, pasados cinco minutos, logró recomponerse, pidió disculpas, explicó que se había tratado de un cuadro de lipotimia y finalizó su discurso. “Una lipotimia no va a impedir que cumpla con mi deber constitucional”, manifestó con humor Schiaretti, mientras era alentado por presentes en el recinto. Posteriormente explicó a los medios que la situación se originó porque padece hipertensión y diabetes y que, a pesar de mantenerlo controlado, hubo algún “desarreglo” en su régimen alimentario. No obstante, señaló que está en “buenas condiciones” luego de ese percance.
La Asamblea Legislativa comenzó poco después de las 9 y concluyó a las 10.20, presidida por el presidente de la Legislatura, Oscar González, con la presencia de 65 legisladores locales, también legisladores nacionales de las distintas bancadas y representantes de distintas instituciones.
En su discurso, Schiaretti afirmó que su gestión “siempre” va a trabajar para “evitar las crisis y garantizar la gobernabilidad en la Argentina democrática”.
El gobernador resaltó el modelo de gestión que lleva adelante desde diciembre de 2015 en la provincia y planteó que busca tener una “correcta relación” con el gobierno nacional. En ese sentido, dijo que esa actitud debería ser “normal” en todas las jurisdicciones para “trabajar juntos para resolver los problemas de la gente, más allá de las diferencias políticas que se dirimen en las elecciones”. “Sabemos que cada vez que hubo crisis de gobernabilidad, las consecuencias fueron el aumento de la pobreza y el sufrimiento de nuestro pueblo”, remarcó Schiaretti al inaugurar el 140mo período de sesiones ordinarias de la Legislatura cordobesa, que es unicameral. Asimismo aclaró que, “más allá de los consensos que desde la oposición le otorgamos para la gobernabilidad, la administración central es responsable de los resultados de las decisiones que toma cuando convoca a ese consenso y pide gobernabilidad”. “Somos la provincia con menor número de empleados públicos por habitante de Argentina”, afirmó al detallar que en estos dos años se disminuyó el escalafón general en 1826 empleados.
En otro tramo del discurso también instó a los argentinos a “tener siempre memoria”, al sostener que “todavía hay compatriotas a los que estamos buscando”, que “son los 30.000 compañeros desaparecidos”.
Ponderó también la reforma política que realizó la provincia, mencionando en ese sentido la Legislatura de una sola cámara, los legisladores sin fueros, y otras reformas en el ámbito de la Justicia.
Schiaretti anunció que para 2019 estarán concluidas todas las obras de los gasoductos troncales en la provincia, que se destinarán 1940 millones de pesos para equipamiento del sistema de salud y que se avanza en la construcción de 1639 escuelas.
Tirón de orejas
El presidente del interbloque de diputados de Cambiemos, Mario Negri, consideró como una “mezquindad” que el gobernador Juan Schiaretti no haya mencionado en su discurso ante la Asamblea Legistativa que gran parte de las obras que anunció ayer para la provincia de Córdoba “se financian con aportes nacionales”.