Destrozos. La joven tuvo un brote psicótico y, además de causar destrozos en su casa, amenazó con matar a su madre hasta que llegó la Policía y la apresó. Piden internarla.

 

Frazadas, remeras y ropa rota, igual que los espejos, los adornos, las puertas y ventanas de la casa. La mayor explosión de violencia despertó mucho temor en el barrio, porque esa furiosa descarga incluía algo mucho más grave: la amenaza de muerte a su propia madre. Todo ese revuelo armó ayer una chica de 17 años que es esquizofrénica. La menor sufrió un brote psicótico en su casa de Caucete y mantuvo en vilo por varias horas a la Policía y a vecinos del Sector V del barrio Felipe Cobas.

 

La que peor la pasó fue su madre, Eli Cabrera (40), golpeada varias veces y amenazada de muerte con un arma blanca. Todo ocurrió ante la atenta mirada de su hermano de 12 años, quien también padeció desde adentro el ataque.

 

Desde el entorno de la joven dijeron que esta no es la primera vez que su enfermedad la lleva a cometer acciones similares, pero sí aseguraron que el brote de ayer fue por lejos el más intenso. "A veces le suelen dar estos ataques, pero hoy -por ayer- se excedió", dijo un cuñado de la adolescente.

 

Todo comenzó cerca de las 17. Ante los primeros signos violentos, la madre de la chica llamó a la Policía. Los uniformados llegaron a la casa y lograron tranquilizarla, pero la calma duró poco. Es que ni bien se fueron protagonizó un segundo episodio, incluso peor. Fue ahí cuando con una tijera empezó a cortar la ropa, pateó lo que estaba a su alcance y golpeó a su madre. Efectivos de la Seccional 9na se vieron obligados a concurrir nuevamente al domicilio, pero esta vez el panorama ya no era tan apacible: la chica tenía arrinconada a Cabrera y amenazaba con clavarle un cúter si la Policía entraba a la vivienda. Desde la vereda los uniformados sólo podían atinar a tratar de tranquilizarla. Para ese entonces ya eran varios los vecinos que se habían agolpado en la zona para presenciar la escena. Recién a eso de las 20 la joven desistió su actitud y se entregó, indicaron desde la familia.

 

 

Una vez que pasó todo, la madre tuvo que recibir asistencia médica debido a que sufrió una fuerte descompostura por los nervios que pasó en la dramática situación.

 

"Pedimos que la internen, que hagan algo. Siempre pasa lo mismo. Mañana la sueltan y vuelve a hacerlo, necesitamos una solución definitiva", pidió el cuñado.