Hoy es juez civil, pero hace unos 15 años, Héctor Rollán trabajaba (como escribiente y, luego, secretario de Paz) en el tribunal que conducía la entonces magistrada Rosalba Marún. En esa tarea, narró que se opuso a liberarle el pago por la expropiación de un inmueble en Cuesta del Viento al abogado Santiago Graffigna, dado que quien tenía que cobrar ese juicio era el dueño del terreno: Ricardo Benito Luna. Frente a ese rechazo, Rollán contó que Marún lo citó a su despacho, en el que se encontraba Graffigna, y le ordenó que haga el libramiento, es decir, que redacte el escrito para habilitar el desembolso. "No correspondía porque es dinero del cliente", resaltó el testigo. Así, el fiscal de Cámara, Daniel Galvani, resaltó que la declaración "es una prueba importante" en la acusación que está llevando adelante para tratar de demostrar que hubo una connivencia entre diferentes protagonistas (abogados, exjueces y exfuncionarios) para sacarle plata al Estado en la megacausa de las expropiaciones.
El testimonio de Rollán causó impacto, ya que se quebró y se le escaparon unas lágrimas cuando reconoció que Marún, su jefa, "firmaba todo (los expedientes) sin leer, sin nada. Una falta total de responsabilidad. No sé si tenía un defecto o si estaba cansada por la edad. No lo puedo comprender. La verdad, me molesta mucho porque la función de juez es tan importante y es un honor tan grande, que no podes hacerlo así. No sos un perejil, no sos uno más".
Ante el escándalo de la megacausa, Marún renunció a su cargo al frente del Juzgado Civil Nº1 para jubilarse, cosa que logró el 1 de enero de 2013, y, así, evitar el Jury de Enjuiciamiento que se había desatado en su contra. El 11 de diciembre de 2015 fue procesada como una de los integrantes de la asociación ilícita que, según la acusación, lideraba Graffigna, pero falleció el 3 de julio de 2021. La postura de Fiscalía y la querella, representada por Fiscalía de Estado, es que hubo un concierto de voluntades para inflar el valor de los terrenos que el Estado expropiaba para quedarse con millones de las arcas oficiales.
En uno de los juicios de expropiaciones de terrenos para la construcción del dique Cuesta del Viento, en Iglesia, que se tramitó en el Juzgado Civil Nº1, Rollán declaró que "la provincia había hecho el depósito de la suma embargada, no recuerdo si en concepto de capital e intereses. Es la plata que se le paga al expropiado". Así, explicó que Graffigna "había pedido el libramiento" y "sólo a su favor por esa suma". El hoy juez dijo que lo habló con su colega Daniela Bustos Laspina (actual jueza de Paz de Rawson), a quien le dijo que "voy a pedir que venga el señor Luna a ratificar (el planteo) porque, en definitiva, es su dinero". Inclusive, Rollán recordó una noticia de esa época de DIARIO DE CUYO, la que reflejaba la disminución de la cota de Cuesta del Viento y que habían salido a la luz las propiedades de la zona. En esa nota, se había entrevistado, justamente, a Luna. "En base a eso, hice un proveído (escrito) para que compareciera porque no estaba seguro que esa persona iba a recibir esa plata. Era para avivarlo", remarcó el testigo.
No obstante, dijo que cayó Graffigna al juzgado y fue hasta el despacho de Marún. Ahí, la entonces jueza le ordenó que hiciera el libramiento porque el abogado "se tiene que ir a Chile" y porque "soy yo la que firmo". Rollán indicó también que la magistrada no recibía a casi ningún profesional, salvo a Graffigna.