En el Gobierno venían notando una especie de "escalada" de casos de violencia al personal de salud desde la pandemia, los que, por costumbre, no se suelen denunciar debido a que se han tratado de agresiones verbales. Por ello, la ministra de la cartera sanitaria, Alejandra Venerando, señaló que "preocupan las agresiones a médicos y a equipos de salud" y destacó que están trabajando en un "programa de concientización integral", es decir, entre todo el personal y con la comunidad, según explicó. La movida se da luego de un hecho extremo, como el ataque con ácido que sufrió el traumatólogo Daniel Luque a manos de Miguel Ángel Cabello (Ver recuadro).
"Las agresiones hacia los profesionales de la salud, en ocasión del ejercicio de su profesión, es una problemática que preocupa al Ministerio de Salud", remarcó Venerando, quien agregó que, "con la pandemia, se empezó a notar un aumento de casos de violencia". Si bien no hay cifras, la titular de la cartera sanitaria explicó que "no hay costumbre de denunciar las agresiones verbales". De hecho, fuentes judiciales explicaron que en el año sólo se ha registrado la denuncia por amenazas de un médico contra personas desconocidas.
Hechos como, justamente, amenazas o lesiones se encuadran dentro de delitos que son castigados con prisión, en suspenso o de manera efectiva, en la Justicia Penal. No obstante, los profesionales y no profesionales de la salud que sean víctimas de otro tipo de agresiones, que no sean delitos, cuentan con otra herramienta de tipo legal. El Código de Faltas, que sanciona contravenciones, establece en su artículo 109 que el "que hostigue, cometa vejaciones, maltrate física, psicológica o verbalmente, golpee, intimide, amenace o ejerza sobre otra persona violencia física o psicológica, siempre que no cause lesiones" será sancionado con multa (de 500 a 3.000 pesos), trabajos de utilidad pública o arresto de hasta treinta 30 días. Además, la normativa determina que cualquiera de ese tipo de faltas "esté dirigida a un trabajador de la salud o de la educación, en ocasión del desarrollo de sus labores, ya sea en establecimientos públicos o privados, las sanciones de multa y arresto podrán elevarse al doble". Es decir, en el caso de multas, de 1.000 a 6.000 pesos, mientras que los días de arresto se van a 60.
Venerando hizo hincapié en que se trabajará fuertemente en la concientización de todo tipo de violencia. Así, indicó que se abordará el vínculo y el trato entre los equipos de salud hacia los pacientes y sus familiares y de estos hacia el personal sanitario. Para ello, irán delineado los puntos del programa con el personal técnico del Ministerio de Salud.
El caso del traumatólogo Luque se ha convertido en el caso de mayor gravedad en cuanto a un ataque a un profesional de la salud que se recuerde en los últimos años. Desde la cartera sanitaria habían sacado un comunicado en el que, en conjunto con el Hospital Rawson, manifestaban su repudio sobre el "acto de violencia, maltrato y agresión ejercida", por lo que expresaban "su solidaridad" hacia el médico y su familia. El hecho es alarmante y en el Ministerio también ha causado preocupación los otros tipos de agresiones que han venido recibiendo el personal de los distintos centros de salud de la provincia. La primera medida apuntará al trabajo de concientización, destacó Venerando.
El ataque al traumatólogo
El viernes pasado, a eso de las 17, Daniel Luque salía del Instituto de Traumatología, de calle Laprida, en Capital, cuando fue abordado por Miguel Ángel Cabello, quien le arrojó un líquido con contenido ácido en el rostro y, supuestamente, le apuntó y gatilló con un arma de fuego para luego escaparse. El médico, que también es jefe del Servicio de Traumatología del Hospital Rawson, fue trasladado al área de quemados del Hospital Marcial Quiroga, en donde se recupera de las lesiones. El agresor fue identificado por los investigadores y fue apresado el sábado. Cabello había acusado a Luque, en su cuenta de Facebook, de haber quedado inválido luego de dos operaciones de rodilla. Inclusive, la versión que circula es que lo demandó en la Justicia.
Desde la pandemia, en el Ministerio de Salud Pública han venido observando un incremento en los casos de violencia contra el personal sanitario, sobre todo, agresiones de tipo verbal, las que, por costumbre, no se suelen denunciar.
La ministra de Salud explicó que está trabajando con su equipo un programa de concientización contra todo tipo de violencia, el cual se focalizará en el trato entre los equipos de salud con los pacientes y sus
familiares.