Increíble por donde se lo mire. Un colectivo que aparentemente había intentado esquivar un perro terminó contra una casa. Pero la versión inicial de los vecinos no contaba con una gran sorpresa: en realidad el chofer era un borracho que le había sacado el vehículo en momentos que el verdadero conductor se había bajado al baño en el paradero.

 

El insólito hecho ocurrió este mediodía en el interior del barrio Sierras Moradas, en el departamento Rawson y generó un gran revuelo entre los vecinos.

 

La medianera detuvo la marcha del vehículo

 

La aventura de este muchacho totalmente ebrio incluyó una perlita desopilante. Se puso a levantar pasajeros como si se tratara de un recorrido normal de la Línea 32 (empresa Vallecito) en esa populosa barriada rawsina.

 

Pero entre la borrachera y la poca pericia para manejar tamaño vehículo terminó su trayecto estrellándose contra una casa, para lo cual atravesó la cuneta, la vereda y sólo lo detuvo una medianera