José Jurado, un puestero de la zona de San Carlos, se encontró con una sorpresa especial mientras realizaba la habitual tarea de reagrupar los animales de su propiedad. Enredado en unos matorrales, un cóndor macho adulto ya no tenía fuerzas para salir de la trampa vegetal y el casual paso del hombre significó su rescate. Jurado lo llevó a su casa y lo alimentó durante un tiempo en un corral, esperando que recobrara energías.

Luego de un par de intentos de liberar la majestuosa ave, que no mostraba signos de voluntad de volar, comentó la situación con un amigo de Sarmiento, Francisco Lucero, quien se comunicó con la Secretaría de Ambiente de la provincia y así fue que agentes provinciales de conservación del Ramsar de Guanacahe se trasladaron hasta la vivienda de Jurado y desde ayer el cóndor recibe atención especializada en el Parque Faunístico de Rivadavia.

Alejandra Cano, subsecretaria de Conservación, afirmó que el ave se encuentra en buen estado de salud en líneas generales, por lo que evaluarán el momento de liberarlo para que regrese a su hábitat. La funcionaria destacó que “la gente toma cada vez más conciencia. Un lugareño lo encuentra y sabe que no lo puede tener. Esto es dar un paso más allá, porque lo podría haber tenido guardado pero sin embargo se preocupó por la salud del animal”.

 

Contacto directo

El último caso de un cóndor rehabilitado fue el año pasado, que también ocurrió por la denuncia de una vecina, al encontrar al animal envenenado a la vera del río, en Pedernal.

La ‘Línea ambiental’ es el 08003333669, el número gratuito de contacto que pone a disposición la Subsecretaría de Conservación para recibir información.