Un endurista, un comerciante y el hijo de éste cayeron presos el domingo a la noche por supuesto contrabando después de un impresionante operativo rastrillaje del personal de Aduana, el grupo GERAS de la Policía y Gendarmería que duró más de un día en la zona cordillerana de Iglesia. Los tres eran buscados desde el sábado a la tarde, ocasión en que burlaron el control aduanero de Chile y el puesto de Gendarmería en Guardia Vieja y escaparon a campo traviesa en una camioneta en la que trasladaban una moto KTM valuada en $180.000, una bicicleta mountain bike y repuestos de motos que traían del vecino país.
Los detenidos son el transportista Fernando Reyes (40), su hijo Gonzalo (18) y el endurista Alberto Zapata Bacur (19), informó la Aduana. Los tres viajaban en una Toyota Hilux y fugaron el sábado a las 16.30 del puesto aduanero en Juntas del Toro, en Chile, en dirección a territorio argentino.
Como ya estaban identificados, los carabineros pidieron a Interpol la captura internacional de todos ellos. Los gendarmes intentaron más tarde cerrar el paso a la Toyota en el puesto de Guardia Vieja, pero el vehículo esquivó la barrera y escapó a gran velocidad para luego meterse a una huella.
Personal de Aduana y Gendarmería los buscaron toda la noche hasta que a las 7 del domingo hallaron la camioneta abandonada en el campo. Los ocupantes siguieron huyendo en la moto y la bicicleta. Con ayuda del GERAS y otros policías, todo el domingo hicieron un operativo cerrojo. A las 23, los Reyes y Zapata Bacur se entregaron en Iglesia. Eso sí, no tenían la moto ni la bicicleta. Dijeron que las dejaron en el campo, pero no sabían dónde.