Por Mario Luis Romero – Enviado especial de DIARIO DE CUYO
Julio ‘El Corcho’ Ortíz mira fijo al frente con los ojos cristalizados. Adelante, a su izquierda, Adolfo Rojo se saca los lentes y se seca las lágrimas. Atrás, casi al final de la pequeña grada, Carlos Rubina se quiebra. En una esquina, al costado izquierdo de la última fila, Stella Maris Montaño (hermana del primer sanjuanino fallecido en las Islas, Hugo Montaño) se emociona, mira la escena, llora, se seca las lágrimas y vuelve a quebrarse.
Tamaña emoción tuvo una explicación. Un excombatiente que reside en Río Gallegos, Andrés Fernández Cabral (58), les regaló una pequeña obra de teatro donde caracteriza las vivencias de un soldado que luchó en la guerra. El detalle y la precisión del relato -reconocen los sanjuaninos- los conmovió.

Los casi 20 minutos en que estuvieron en una improvisada sala teatral llegaron al corazón. Se notó al final. Un aplauso cerrado que pareció ensordecer al grupo. Varios buscaron al veterano actor para estrecharse en un abrazo. El huaqueño Duilio Dojorti lo saludó y pidió permiso para recitar el poema ‘Quiero Volver’ de Don Buenaventura Luna, y volvió a reinar la emoción.
Pero había más. ‘El Corcho’, querido en el grupo por ser el que siempre tiene una frase para desatar la risa en los compañeros, se sacó un rosario de su cuello y, envuelto en llanto, abrazó a Fernández Cabral. Lloraba como si fuera un niño desconsolado.

Fue, sin dudas, el primer golpe al corazón del contingente sanjuanino que este sábado pisará Malvinas. La escena tan emotiva –incluso- cayó por sorpresa al médico psiquiatra que acompaña la delegación, Sebastián Varea. Sabe que habrá que estar cerca, acompañarlos, tema que no será un problema para alguien que hace tres meses viene conversando con ellos, pero que no estaba en la hoja de ruta de su tarea en Gallegos.
No estaba en los planes de nadie este golpe al corazón. Incluso, en la previa, cuando se propuso esta actividad más de un veterano puso en duda que alguien pueda representar aquello que sólo ellos saben que tan duro resultó. A la postre, fueron palabras que resultaron vetustas luego de ver la excelente interpretación del excombatiente local.
