En 2014, Héctor Luque conoció a un paciente que recién ingresaba a la clínica de rehabilitación porteña en la que trabajaba. Era José Espejo, un sanjuanino que había sufrido un grave accidente que lo dejó cuadripléjico. Ellos compartieron tres años, pero de golpe, el paciente recibió el alta y Héctor no volvió a verlo. Ahora, lo busca para saber cómo está.
“José es minero y una noche sufrió un accidente cuando bajaba de la montaña. Él manejaba la camioneta, pero su compañero le dijo ‘dejame a mí, manejo yo’. Después, se durmió y desbarrancaron. José quedó en silla de ruedas y fue a la clínica Alpi a rehabilitarse. Ahí nos conocimos”, contó el camillero.
Juntos compartieron gran parte de las 8 horas que Héctor pasaba en la clínica. “Lo ayudaba a bañarse, le enseñé a moverse en la silla, compartimos comidas, logramos una buena relación”, comentó.
Y agregó que “recuerdo que era hincha de Vélez. Yo soy de Boca y cada vez que había un partido nos hacíamos chistes. También me acuerdo de que tenía poco pelo. Su esposa se llama Miriam y tiene dos hijos, que en ese momento tenían unos 4 y 7 años”.
Un día, Héctor llegó a trabajar y José ya no estaba. “Entré a su habitación y estaba vacía. Le habían dado el alta y él había vuelto a San Juan. Hace dos años empecé a recordarlo con más frecuencia y comencé a buscarlo, pero no lo encuentro. Sólo quiero saber cómo está”, dijo el hombre que normalmente mantiene contacto con los pacientes con los que logra entablar una relación de amistad.
“Me gustaría que si él se entera que lo estoy buscando se comunique conmigo. Mi número es 011-1533080715”, sostuvo.