Un gran perjuicio causaron las llamas que arrasaron con cepas de un parral, pasaron a un viejo camión y dos acoplados, y luego a la gran galería y las habitaciones de la casa, que quedó inhabitable. Allí le prestaban para vivir a Patricia Frías, si alguien desea colaborar con su familia puede llamar al 2645323150.

 

Faltaba poco para las once de la noche cuando unos ruidos en el fondo sacaron de la rutina a Patricia Frías, a su hijo menor y a su hermano que acababa de llegar. Instantes después se vieron embargados por una situación dramática, porque los ruidos venían de las llamas que habían destruido las cepas de un parral desarmado, un viejo camión cargado con rejillas para el secado de pasas, un acoplado con cajones para uva y avanzaban sin remedio hacia una gran galería.

Desesperados, atinaron a sacar algo para evitar que el desastre fuera total y dañara las pocas cosas que tenían en las dos habitaciones que ocupaban, pero el perjuicio fue inevitable: Patricia y su familia perdieron dos televisores y un termotanque. Y en la galería, se perdieron máquinas para hacer vino, una hidrolavadora, dos heladeras, mesas y muebles, otros aparatos y las herramientas de la finca. Bomberos, controló el siniestro.

Ocurrió en la finca de Roberto Más en Callejón Cervantes entre Yapeyú y Florida, en el distrito Dos Acequias, San Martín. Allí, Más ocupaba la galería y les prestaba dos habitaciones para vivir a Patricia, su marido y sus dos hijos desde hace 15 años.

‘Todos acá pensamos que alguien prendió fuego, porque fue muy rápido y porque fue en el fondo y allí no hicimos fuego, si hubiera sido en la calle era otra cosa. Lo lamentable es que ahora no tenemos donde vivir’, dijo Patricia Frías.

 

‘Fue grande el daño, no hice números pero he perdido por lo menos $200.000. Construir nomás no es barato’, dijo Más.