Poco antes del mediodía, ayer en el Hospital Rawson ocurrió un incidente que congeló la sangre a todos los testigos y especialmente a los 7 protagonistas, cuando un ascensor no soportó la sobrecarga y repentinamente tuvo un brusco descenso, que hizo temer lo peor.
En el sector de Maternidad, un susto mayúsculo vivieron 7 personas cuando intentaron trasladarse al mismo tiempo en una de las unidades, que indica como máxima capacidad de carga a 4 personas.
Esta vez, haber desobedecido a las recomendaciones trajo consecuencias, cuando el ascensor no soportó la sobrecarga y se "desplomó" para quedar unos 50 centímetros por debajo del nivel del piso.
Entre personal del nosocomio y visitantes, quien se llevó la peor parte, según afirmaron fuentes del Hospital, fue el camillero, identificado como Juan Carlos Riveros, quien resultó con secuelas de la estrepitosa caída, ya que se le desvió la rótula de una pierna.
Si bien no hubo que lamentar daños y consecuencias más importantes, quedó el interrogante que no se haya activado previamente otro tipo de dispositivo de seguridad. No fue posible contactar a funcionarios del área, sí se supo que el ascensor no se detuvo a nivel, continuó descendiendo y se tuvieron que accionar los frenos de emergencia. La rutina de mantenimiento estará ahora bajo la lupa para determinar la razón por la que el ascensor no funcionó correctamente.
Hace 10 años que esta obra del remodelado Hospital Rawson está en funcionamiento, por lo que nuevamente queda bajo la atención definir si se realizó correctamente el servicio de mantenimiento del ascensor.
La sala llovida
A principio de mes, un video que se viralizó en las redes sociales mostraba cómo una sala del área de pediatría del servicio de urgencias del Hospital Rawson era afectada por la lluvia que se filtraba desde el techo, debiendo ser totalmente desalojada.
La explicación oficial fue que un hierro u otro elemento que cayó, afectó un codo del sistema de desagüe pluvial. Debido a la inclinación de los techos, el agua se fue acumulando en un área determinada y por eso comenzó a filtrarse copiosamente a través del cielo raso de esa sala de descanso del hospital. Desde su inauguración en 2017 fue el primer inconveniente, aseguraron.