Después de nueve agotadoras noches de monta, Jesús María esperaba el domingo para la definición del Campeonato Nacional de Jineteada, la meca a la que peregrinan todos los jinetes de Argentina.
Consagrarse campeón en Jesús María prestigia al montador y le augura un año de mucho trabajo en otros ruedos. Además de llevarse un interesante premio en efectivo y en otros objetos de valor.
La tarde del domingo esperaba resuelta la disputa solamente en la categoría Gurupa surera porque Agustín Carlos Romero Montivero (San Juan) con 62,96 puntos se había despegado lo suficiente de su inmediato seguidor, Joaquín Zabala (Capital Federal) 49,32, y la diferencia era difícil de descontar.
Romero Montivero despejó toda duda, cinco minutos antes de las 21, cuando le arrancó buenos corcovos al Guitarrero, un reservado gateado, desde el palenque uno.
El “Cebolla” cómo le dicen sus conocidos quedó de rodillas en la grama del campo con lágrimas en los ojos. Ya era campeón.
Pegado a él, salió Zabala desde el palenque dos. También se mandó un jineteadón y sobre la campana se cayó su caballo, pero él se mantuvo en el lomo.
Y como Fontana, su seguidor, no pudo completar su monta, le dejó el camino despejado para obtener el subcampeonato.
Galeano, desde el palenque uno, le aguantó el embate a su reservado y se coló en el tercer puesto.
Fuente: La Voz
