"Todo partió de una información errónea. Eso creó malestar en la sociedad y en el ministro (de Gobierno, Emilio Baistrocchi)". La frase es del juez de Flagrancia Ricardo Moine, quien explicó y dio detalles de la resolución con la que absolvió por el beneficio de la duda a Marcelo Javier Ramírez de un robo. El sospechoso cuenta con 20 causas abiertas en la Justicia por delitos contra la propiedad. El magistrado no quiso puntualizar sobre quién había brindado el dato erróneo, pero lo cierto fue que el fiscal Adrián Riveros había señalado que las cámaras de seguridad del supermercado Walmart registraron cuando el sospechoso y su pareja rompieron el vidrio de un auto y se llevaron un bolso con 20 mil pesos. Sin embargo, Moine aseguró que "no existe esa filmación" y que "el encargado de las cámaras de seguridad manifestó en el juicio que no se ve el auto de la víctima, por lo que no está registrada ninguna rotura de vidrio ni sustracción".

En ese marco, el juez ratificó su fallo al señalar que "no había pruebas" contra el sospechoso por el robo y que se "detuvo a la persona por sus antecedentes". Además, destacó que su sentencia absolutoria quedó confirmada, dado que el fiscal no acudió a la Corte de Justicia para revertir la sentencia.

La absolución que había dictado Moine contra un delincuente que carga sobre sus espaldas 20 causas abiertas había provocado malestar. Inclusive el ministro de Gobierno, Emilio Baistrocchi, había criticado al juez por la decisión. Pero el magistrado no buscó polemizar con nadie sino señalar que la información que se suministró originalmente fue errónea y apuntó a aclarar el sentido de su fallo.

Además, destacó que en las cámaras de seguridad ni siquiera se lo ve al imputado sino a su vehículo, que un policía de adicional reconoció como de propiedad de Ramírez, quien carga con múltiples antecedentes sin condenas.