La regularidad, fue escolta en las dos etapas disputadas de la Vuelta, ha permitido al italiano, de 27 años, Elia Viviani, ser el nuevo líder de la clasificación general. Coronado campeón olímpico de Omnium, en los Juegos de Río, disputados en agosto pasado, este velocista nacido en Isola della Scala, una pequeña localidad de Verona, dijo estar ‘orgulloso’ de vestir la malla de líder de la carrera.
‘La etapa fue muy intensa, costó que se hiciera la fuga y cuando se hizo, desde el pelotón nos esforzamos para controlarla’, expresó.
Quien es compañero de Christopher Froome en el poderoso Team Sky, que llegó a San Juan defendiendo la casaca ‘nazionale’ de Italia, contó que se tiene fe para la etapa contrarreloj. ‘No es tan larga y permitirá que los velocistas nos defendamos mejor que en otras competencias donde la extensión beneficia más a los rodadores’.
Consultado sobre cómo puede hacerse para vencer al tren del Quick Steep-Floors con un equipo como el suyo integrado por mayoría de valores jóvenes que están ganando experiencia, contó, tomándose su tiempo, que ‘sus compañeros trabajaron bien’, pero lamentó no haber ‘atacado antes’. ‘Siento menos frustración que en la primera etapa. Esta tarde (por ayer) pude pelear el sprint, pero lamento haber atacado un poco tarde. Lo único que tengo para criticarme es no haberme decidido a levantar antes’, afirmó.
Finalmente, resaltó que haber escoltado dos veces a los hombres rápidos del equipo belga tiene su mérito. ‘Ellos tienen un entreno preparado para ganar etapas del Tour de Francia y es muy difícil doblegarlos’. Para luego, con una sonrisa, rematar: ‘Creo que si hoy los sorprendía un poco más de lejos hubiera tenido alguna posibilidad de conseguir quedarme con la etapa. Sin embargo, logré ganar la -maglia- de líder y la voy a defender con todo porque es muy importante vestirla en una carrera con un pelotón de mucha calidad’.