Un sargento de la Policía de 49 años, empezará desde el próximo lunes a ser juzgado en la Sala I de la Cámara Penal por aberrantes delitos sexuales cometidos contra su propio hijo cuando era adolescente. Según la acusación, el sospechoso convenció al chico para que ejerciera un rol activo en al menos cuatro casos de relaciones sexuales entre ambos, con la excusa de que eran para su aprendizaje, dijeron fuentes judiciales. Tan complicado está el acusado, que el próximo lunes podría llegar a pactar un juicio abreviado por medio de sus defensores Gustavo de la Fuente y Juan Manuel Vargas, con la fiscal Marcela Torres. Así, evitaría el desgaste de un juicio común.
El policía quedó detenido el 4 de julio de 2019, luego de la denuncia efectuada por la madre del chico en el ANIVI. La mujer cumplió un rol clave en el descubrimiento de los hechos, pues había notado muy preocupado a su hijo (por entonces de 17 años) y lo animó a contarle. Fue entonces que el menor se despachó con una verdad que no estaba en sus cálculos y la dejó indignada, pues el muchacho le contó de las desagradables experiencias sexuales que había vivido, obligado por su padre, desde que tenía 15 años.
El delito que le atribuyen al policía está calificado como abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo. Tiene una pena mínima de 8 años de cárcel.