Hacer crecer césped en un terreno donde antes había hornos de ladrillos parecía una misión imposible. Con escombros y pedazos de ladrillos braseados, no era muy fértil para hacer crecer la chepica. Aun así la familia Zambrano hizo posible lo imposible y a pico y pala, hicieron de ese baldío una cancha de fútbol para "Los Santitos" que ahora preparan un campo de juego mayor.

Ubicado en Alto de Sierra, Santa Lucía, la escuelita de fútbol comenzó hace cinco años. Un grupo de amigos armaron un rejunte para jugar un torneo municipal y salieron campeones. Esa motivación los llevó a seguir entrenando y así fue que continuaron, incluso con el nombre que ellos mismos se habían puesto. "Los Santitos" entrenaban como nómades, pedían canchas prestadas o alquilaban predios. Hasta que un día, cuando llevaban 2 años, uno de los profes, Daniel Zambrano, decidió ir más allá y poner a disposición un terreno -propiedad de su padre- en aquel lugar. "Hacer un quincho con pileta era el boom del momento pero el entusiasmo de mi hijo Santiago de querer tener la cancha para jugar al fútbol con sus amigos, fue mi motor", comentó Daniel, quien con su pequeño, en ese momento de 10 años, comenzaron a trabajar en el lugar. Dice que fueron largas tardes bajo el sol, acarreando escombros hasta que llegó la ayuda del municipio, quien colaboró con las máquinas y tractores para agilizar notablemente la nivelación del terreno.

Divertirse, el objetivo. La idea de la escuelita de Alto de Sierra es que los pequeños
aprendan valores y se diviertan.

El avance era notorio y la motivación mayor, por eso realizaron rifas para poder comprar las semillas de chepica y hacer el césped realidad. Pero claro, de los 15 chicos que comenzaron la cifra se incrementó con los años, tanto que hoy practican unos 80 chicos de entre 5 y 15 años. Es por eso que, también en un terreno familiar lindante, ya preparan otro campo de juego (ver aparte). "Hacen falta más espacios así, donde a través del fútbol se pueda brindar contención y sobre todo enseñarles valores. Que sepan que no es una competencia y que lo más importante es divertirse", contó Zambrano.

Los chicos pagan una cuota mínima y la idea de la Escuelita es fomentar valores como la amistad y el respeto. "La idea es que se diviertan y si después de los 12 años los chicos tienen condiciones, los padres decidirán si mandarlos a un club para explotar ese talento", expresó.

 

Otra cancha para los más grandes

Debido al crecimiento de la escuelita "Los Santitos" es que ya preparan otro campo de juego. La canchita de "11" ya comienza a a verse en un terreno lindante, también propiedad de la familia en donde ya hicieron la nivelación del terreno y todo apunta a que esté en condiciones dentro se unos meses. Es que la municipalidad también les hizo recientemente un reservorio de agua (foto) y con eso será más fácil hacer realidad ese sueño. Además de Zambrano, los otros profes de la Escuelita son Carlos Coria y Nahuel Ozán.