Carácter. Es lo que mostró Independiente una vez más en un partido de este calibre. Con un jugador menos, se las arregló para empatar 1-1 contra el campeón de la Libertadores, Gremio. En una semana define en Brasil.

 

Independiente, a pesar de jugar más de una hora con uno menos por la expulsión de Emmanuel Gigliotti, empató anoche 1-1 con Gremio de Porto Alegre, en la primera final de la Recopa Sudamericana de fútbol, donde el gol de visitante no cuenta doble.

El conjunto brasileño abrió la cuenta a los 21 minutos de la primera parte, por intermedio de Luan.

El equipo de Avellaneda estableció la igualdad a los 33 minutos de ese segmento de arranque, a través de un tiro libre del ecuatoriano Fernando Gaibor que encontró el desvío del defensor Bruno Cortez para complicar al arquero Marcelo Grohe. A esa altura, el “Rojo” ya jugaba con diez hombres, a partir de la expulsión que el árbitro ecuatoriano Roddy Zambrano decretó para Gigliotti, por agresión a Walter Kannemann, mediante la utilización del polémico VAR.

En el arranque, Gremio empezó mejor, con tenencia por ambos costados, pero el “Rojo” recuperó la pelota y equilibró las acciones. A los 16″ llegó la primera chance nítida para el conjunto del DT Holan, con un cabezazo de Meza al travesaño, mientras que un rato después (19m.), un desborde de Jonathan Menéndez casi le permite convertir a Martín Benítez, que falló en el disparo final.

 

La revancha será el próximo miércoles en Porto Alegre.

En la primera aproximación concreta a la valla del uruguayo Campaña, la formación “tricolor” consiguió la apertura: el defensor venezolano Fernando Amorebieta se equivocó en la salida y Luan aprovechó para definir cruzado y señalar el 1-0. Sobre los 24 minutos llegó la jugada que cambió el pulso del partido, el delantero Gigliotti le entró fuerte al misionero Walter Kannemann y recibió, de entrada, la tarjeta amarilla y luego la roja, tras observar la jugada en el VAR (ver aparte). A pesar de la inferioridad numérica, Independiente se acomodó mejor en la cancha y cambió el dibujo táctico, apelando a un 4-4-1

En la segunda etapa, el equipo brasileño intentó modificar el desarrollo. Pero no tuvo la claridad suficiente y, de a poco, empezó a conformarse con la igualdad en calidad de visitante. Independiente no tuvo ya la suficiente fuerza como para arribar a la valla contraria. El ingreso de Leandro Fernández no brindó las respuestas esperadas. Recién en el final, Gremio se animó a jugar más adelante en el campo, pero casi que no construyó ninguna chance nítida, porque Luan tuvo que bajar en muchas ocasiones a la posición de mediocampista central, para hacerse de la pelota. La chance más clara que tuvo el elenco visitante la tuvo Luan, otra vez, con una pelota que disputó en el área y que originó una salvada a puro coraje del venezolano Amorebieta, que no dudó en ir al piso para aventar el peligro.