43 días pasaron desde el último partido oficial que disputó Lionel Messi. Desde aquella eliminación de la selección argentina a manos de Francia en los octavos de final del Mundial de Rusia 2018 que "la Pulga" no entraba en contacto con la pelota de manera oficial. Se lo vio en las playas paradisiacas de Ibiza rodeado de sus afectos más cercanos buscando recargar energías tras el duro golpe con la selección.
El rosarino volvió al ruedo ayer domingo, en la Supercopa de España que Barcelona le ganó (2-1) al Sevilla en Tánger, Marruecos. Fue su debut en la temporada 2018-2019.
Esta nueva corona le permite a Messi romper otro récord con la camiseta del conjunto catalán. Esta Supercopa de España es su título número 33 en el club, registro que le permite superar a Andrés Iniesta, que se marchó al Vissel Kobe de Japón y quedó con 32.
Messi jugó suelto por el medio del campo. Ante un Sevilla que hizo un planteo inteligente, no entró tanto en contacto con la pelota. Sin embargo, cuando lo hizo, marcó la diferencia con pases y habilitaciones de gran precisión.
Jordi Alba fue uno de los privilegiados por la lucidez del capitán del elenco Blaugrana. Ya al minuto 3", Messi le dio un gran pase filtrado para que mande un centro al medio, posteriormente rechazado por la defensa. Sobre los 17", el rosarino se filtró entre los rivales con la pelota al pie y habilitó a su compañero, que sacó un remate bien contenido por el arquero.
Con el Barcelona en desventaja, una soberbia ejecución de pelota parada de Messi iba a ser clave para llegar al empate. Sobre los 40, el delantero se hizo cargo de un tiro libre y, con su sutil pegada, estrelló el disparo en el palo. En el rebote, apareció Gerard Piqué para marcar el 1-1.
Ya en la segunda parte, Messi volvió a tener una chance con un tiro libre. Esta vez, prevaleció el arquero checo Tomas Vaclik, que se quedó con el remate. Sólo tres minutos después, el rosarino asistió a Ousmane Dembélé, que se topó con otra buena cobertura del guardametas rival.
El rol de "la Pulga" se sostuvo en el complemento: no necesitó de tener tanto la pelota en los pies, sino que apostó a ser un pasador preciso.
Su mejor chance estuvo a los 32". Luis Suárez remató y Vaclik tapó. En el rebote, Messi definió y otra vez se lució el arquero.
Finalmente, el delantero tuvo su aporte en el triunfo: dio el pase para el estupendo gol de Ousmane Dembélé, que finalmente consagró al Barcelona. Claro que sobre el final, debió aparecer el arquero del club catalán Ter Stegen para a los 43" contenerle un penal que ejecutó el francés Ben Yedder y que tuvo al cuidapalos como héroe al contener el remate débil.
Así, por primera vez, Messi levantó una copa como capitán principal.
Ya se marea
Messi sumó ayer su título 33 como futbolista profesional del Barcelona. El resumen de sus vueltas olímpicas es el siguiente: 9 Ligas de España, 6 Copas del Rey, 4 Champions League, 3 Mundiales de Clubes, 8 Supercopas de España y 3 Supercopas de Europa. Y tiene contrato vigente hasta el 2022.
El VAR debutó "contra" la Pulga
El fútbol español le abrió la puerta a la Asistencia Arbitral por Video (el VAR) de cara a la temporada 2018/2019. Y la primera intervención, decisiva, se dio en el duelo por Supercopa española entre Sevilla y Barcelona en Tánger, Marruecos: Pablo Sarabia logró celebrar el 1-0 con cierto retardo hasta que el árbitro Carlos del Cerro Grande constató que estaba habilitado.
Sucedió a los 8 minutos de la primera parte, del encuentro disputado en Marruecos: parte del plan de juego del director técnico Pablo Machín, del Sevilla, ordenadamente refugiado ante el ataque del Barça, recuperó y salió rápido de contraataque a partir de la velocidad de Luis Muriel.
El colombiano amagó la acción individual y, cuando desacomodó a Piqué, cedió para Pablo Sarabia, quien enganchó y remató de zurda para batir a Ter Stegen y firmar el 1-0.
Pero, en primera instancia, el juez del Cerro Grande anuló la acción a instancias del juez asistente.
Sin embargo, enseguida se tocó el oído, marcando que recibía un mensaje a través del intercomunicador. Y desde el VAR le confirmaron que Sarabia se hallaba habilitado. Así fue el debut de la Asistencia Arbitral por Video en España. Y, en esta ocasión, lo sufrieron el Barcelona y Lionel Messi.