Encuentra tu paz interior, es lo que replica varias veces y la oportunidad será esta vez para San Juan. El título de su charla es "Como vivir lo que siempre soñaste y te mereces’. Reflexiones, ejemplos de la vida diaria, cuestionamientos de la gente y un palpito especial para dibujar el día a día. Claudio M. Domínguez, encontró su tiempo para responder a Revista Oh! antes de dar su charla en el Centro de Convenciones, calle 25 de mayo y Las Heras a las 21hs. El costo de la entrada es de $500 e incluye su libro "Porque cambie mi vida’ y un CD. Si estas interesado en escucharlo podes entrar en la página Web de Diario de Cuyo donde se sortean entradas para el evento.

¿Cómo es posible ser feliz hoy?

Esta es una pregunta clave y la respuesta, lamentablemente, no es obvia. No todos podrán contestarla afirmativamente. La mayoría de las personas que sienten que no pueden o no logran ser felices viven en esa situación porque lo que en realidad creen es que no merecen ser felices. No importa cuántos buenos intentos realicen, no importa cuántas ganas tengan. No logran ser felices porque están atrapados en esa convicción de muerte, en ese error que apenas les permite respirar. Y, no se trata de casos aislados. Todo lo contrario. En la sociedad en que vivimos, nadie ha sido educado para ser feliz. 

Pensá, con qué mensajes fuiste educado. Observá, cómo aún hoy se educa a los niños inculcándoles que tienen que ser alguien en la vida. Ese ser alguien se relaciona con un título, con una profesión, con una posición social y económica. No se relaciona con la necesidad de ser feliz. Se relaciona con tener y no con ser. Con hacer y no con realizarse. Nunca nos dicen "tenés que entender quién sos, tenés que descubrir para qué estás aquí, tenés que hacer lo que viniste a hacer, tenés que ser feliz’.

Pero, cuando no nos explican esto, vivimos con la autoestima baja, vivimos con fobias y miedos, deambulamos patéticamente como una hoja sacudida por el viento; y creemos que si hoy nos quieren la vida tiene sentido y si mañana dejan de querernos, no vale la pena vivir. Y así, sos un eterno discapacitado emocional.

Vivís dependiendo del estímulo externo; necesitas que te quieran, que te acepten, que piensen bien de vos para que tu propia vida pueda seguir adelante. Nadie puede ser feliz de ese modo. 

¿Se puede crear la felicidad? ¿por dónde empezar?

Sólo cuando logras entender definitivamente quién sos, ese tesoro, como lo definió Jesús: "chispas divinas creadas a imagen y semejanza del Padre’, podes comprender tu derecho a ser feliz. "Sai Baba’ nos dice que la autoestima real, no es el orgullo, es la comprensión de quiénes somos. Cuando logramos asumir que somos seres divinos, entonces comprendemos que la felicidad es nuestro derecho, comprendemos que la felicidad es nuestra naturaleza y nuestro destino.

¿Es fácil sostener mi sueño en medio de tanta turbulencia?

Si hay escasez en tu vida, eso es porque vos estás siendo el obstáculo. Nuestros pensamientos crean nuestra realidad. Las investigaciones más avanzadas en el campo de la física cuántica, determinan que la mente no distingue entre lo que es real y lo que nos imaginamos, por lo tanto, es bueno que cada día visualicemos como queremos que sea nuestra vida. Si visualizas la realidad que crees merecer, el universo conspirará a tu favor. Es importante confiar, visualizar con lujo de detalles la vida que te gustaría estar viviendo. Hay que tener en cuenta que existen leyes físicas que nos hacen experimentar el proceso de creación, es decir, cuando sembramos una semilla, no podemos pretender que en un día crezca un árbol. Potencialmente todo está a nuestro alcance.

¿Por qué somos destructivos con el otro?

Todos hemos obrado en muchas ocasiones del pasado con ignorancia. ¿Cómo podríamos exigir que hable con propiedad una criatura que está empezando a balbucear? De ese mismo modo, no hay que flagelarse por las acciones cometidas, cuando no teníamos el discernimiento adecuado. Tampoco podemos evitar las consecuencias de lo sucedido, el inevitable efecto que sigue a toda causa. Lo que sí podemos hacer en este mismo instante, es reconocer la situación, saber plenamente el alcance de la misma, y no repetir un accionar cuyos resultados ya hemos experimentado, con el sufrimiento maestro que derivo de ello. Eso es salir de la autoignorancia y pasar al autoconocimiento. De allí, que las personas conscientes de que todo acto tiene una consecuencia, nos recuerdan todo el tiempo, el estado de observación continua, la comprensión de lo adormecidos que hemos estado en el pasado, de este nuevo y perfecto despertar, aquí y ahora, y de perdonarnos completamente por no haber sabido, pero teniendo presente en todo momento, la no repetición de hechos que causaron sufrimiento a otros.

¿Quién es el maestro de nuestra vida?

El Maestro está en Uno, no entreguemos más la antorcha olímpica, mantengámosla flameando en nuestro corazón. Desde aquella explicación de Sai en la India, tardé muchos años más en, finalmente, cesar con la búsqueda devocional y estéril de maestros externos. Ilusión, ego, necesidad, carencia, sufrimiento, y las nubes que se abren ante el sol que siempre somos y no podemos dejar de ser.

¿Cómo vencer el miedo?

Nos aparecen miedos, todo el tiempo; nuestra mente no descansa y hasta parece disfrutar recordándonos aquellas cosas a las que les tememos. El miedo necesita dos elementos para existir, y si logramos deschavar esos dos elementos, exponerlos, no bloquearlos, el miedo se va. El primer elemento es la identificación con el cuerpo. El miedo es la identificación con algo que uno cree que va a perder. Ese algo parece tan real, tan nuestro, nos da seguridad tenerlo, nos mantiene vivos. Este cuerpo, esta vida, es lo que yo creo que voy a perder… A medida que vamos viviendo, vamos muriendo. Esto indica que eso que tanto queremos conservar, eso ya se nos está yendo, desde que uno nace empieza el derrotero. La mente sólo necesita que haya un futuro para alimentar el miedo. El único momento, en que no nos puede suceder aquello a lo que le tenemos miedo, es aquí y ahora. Por eso se dice que, si la mente lograra cada vez que tenemos miedo, ser expuesta por el ser y lograr volver aquí y ahora, el miedo deja de existir.  En el pasado no podemos hacer nada más que lamentarnos y crear residuos químicos enfermos en el cuerpo. En el futuro no podemos hacer nada más que inferir quimeras, ilusiones, que también nos generan estado de ansiedad y destruyen el sistema inmunológico, porque nunca sucedió todavía. No nos adelantemos y no nos perdamos el único momento vital en el que somos dueños de nuestra vida, que es ya mismo.