Un miembro de los equipos de rescate se encuentra luchando por su vida y otros tres resultaron heridos leves como consecuencia del accidente sufrido a bordo de un vehículo durante las operaciones para salvar a doce niños y un adulto atrapados en una cueva de Tailandia.

 

Las cuatro personas viajaban en una camioneta que se precipitó por un barranco en la tarde del sábado. La fuente apunta al desconocimiento del conductor sobre el terreno por donde transitaba como la causa del siniestro.

 

El jueves, un buzo de 38 años perdió la vida cuando se encontraba buceando tras completar una misión de abastecimiento. El fallecimiento del experimentado buceador sirve de ejemplo, según las autoridades, para exponer la dificultad de las tareas de salvamento a las que se enfrentan los equipos.

 

Las autoridades continúan evaluando las opciones para sacar al grupo aprisionado desde hace dos semanas en las profundidades de una laberíntica cueva con pasadizos parcialmente inundados, de la norteña provincia de Chiang Rai.

 

Los responsables barajan dos opciones para la salida del grupo: bucear a través de los túneles subterráneos empantanados o encontrar una fisura en la montaña que sirva como puerta de salida alternativa.