Saludado por todos, muchos que lo idolatran, "El Willy" como le dicen todos agradecía a su equipo porque confió en él para definir una prueba complicada. "Siempre es bueno ganar, este es un triunfo que ayuda porque no estoy en la plenitud física. Una hernia que arrastro de hace tiempo y una molesta lumbalgia me impiden entrenar como me gusta, pero poco a poco voy encontrando mi mejor forma. Que espero tenerla para las clásicas de enero", comentó Lucero. Sobre el embalaje dijo poco pero fue muy claro. "Faltando 200 metros me puse al frente y ataqué, dejando la vida en cada pedaleada, era mi oportunidad y no la desaproveché".