Cinco días después de haber desaparecido, Santiago Maldonado fue buscado por fuerzas especializadas caninas bajo la orden del juez Guido Otranto. Ninguno de los operativos que se hicieron dieron resultado, hasta que el caso cambió de magistrado y se pudo dar con el cuerpo del joven. Periodismo para todos publicó varios videos del primer rastrillaje en el que uno de los animales intentaba continuar el rastro a través del agua.

 

En las imágenes se ve al perro llamado Corban olfatear el piso, continuando el rastro del chico desaparecido. El animal sigue el camino hacia el agua, debajo de las ramas de los sauces que nacen en la orilla del río Chubut. Allí se queda. Frena. Mira al hombre que lo lleva. Vuelve a mirar y señalar la orilla. Se mete al agua. Sale. Se queda.

 

 

"Según los testimonios de ustedes, dicen que la Gendarmería lo lleva. Por eso quise confirmar que el rastro se perdía ahí arriba. Pero no hace eso el rastro: el perro siempre vuelve al mismo lugar. ¿Se dieron cuenta de lo que hizo el perro? Si perdía el rastro es probable que alguien se lo hubiera llevado porque el rastro se perdía. Pero no pasó eso", dijo en ese momento, el guía que llevaba al animal.

 

Luego, en otra parte del rastrillaje, la misma persona llegó a la idea de que Maldonado siguió ese camino y que no fue secuestrado en la zona. "La conclusión que saco es por lo que hace el perro. El perro quiere seguir, meterse al agua. Si ustedes quieren nosotros podemos rastrear desde el otro lado si cruzó o no", afirmó, hablándoles a los mapuches de Pu Lof Cushamen, entre los que estaba Fausto Jones Huala, hermano del líder de la RAM, detenido. "No me parece", fue la respuesta que consiguió.